Redactor
Kingston, Jamaica. - Parece que el sonido de las vuvuzelas desconcentró a la Tricolor. El equipo de Jorge Luis Pinto, entró perdido ayer a la cancha del “coliseo” jamaiquino y le costó encontrar su mejor fútbol. Ni el hombre de más con el que contó el segundo tiempo le permitió superar a los incómodos “Reggae Boyz”.
Un equipo de Jamaica que apenas en el arranque se insinuó en el ataque. Ni “Chope” ni Marín se habían sentado cuando un error de salida en la banda izquierda de Porfirio López provocó que Patrick Pemberton tuviera que intervenir de manera salvadora.
Buen juego del arquero manudo, punto alto de la “Sele”.
Ayer, la banda izquierda de la nacional fue una tremenda pesadilla, principalmente por el volante Je-Vaughn Watson que con una zancada tremenda, al mejor estilo del atleta Usain Bolt tuvo por la calle de la amargura a López y Bismarck Acosta.
A la escuadra patria le costó demasiado el fútbol de creación, de toque, y no era para menos, con solo tres entrenamientos es imposible hallar sociedades y por eso, casi de que de forma aislada se llegó con peligro al marco rival.
Juan Diego Monge lo intentó pero estaba demasiado solo, mientras Pablo Gabas, trató de convertirse en el conductor del equipo pero a punta de patadas lo sacaron del juego.
En el segundo tiempo mejoramos, porque en el arranque de la complementaria, los ticos intentaron poner la pelota al suelo, dejar de pelotear, sin embargo, los errores atrás persistieron y obligaron a Pemberton a mantener el cero en el marcador con una intervención que tenía sello de gol.
Con las variantes, la “Sele” encontró más espacios. Arrieta la tuvo clarísima frente al marco pero la comió de manera increíble.
Viendo el gesto del atacante morado está claro que todavía debe estar pensado como desperdició dicha opción que era más difícil fallarla que meterla.
Con los cambios los costarricenses mejoraron en su volumen ofensivo, el ingreso de Luis Diego Cordero le permitió a los ticos llegar con más profundidad y tener más posesión de pelota.
Al final, Costa Rica sale con un gris y poco vistoso empate a cero de nuevo ante los caribeños.
En un juego aburrido, malo en calidad y en el que la afición disfrutó tomando cervezas en la gradería. Concluyo lo siguiente: se rescatan individualidades, como las de Tejeda, Cubero y Luis Diego Cordero, pero a otros, hoy por hoy, les queda grande la “Roja”.
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