Al llegar a la casa Hanna llamaría a su novio Bryan y le diría: “¡Venga, siéntese aquí!”.
¿Qué significaba eso?
Pues nada, que nuestra Campeona Mundial, iba a sacar la Biblia para leer algunos pasajes y con ello agradecerle a Dios que la operación había sido un éxito.
Así lo adelantó “Tiquito”quien, de ante mano, le tenía la casa limpia y ordenada para que ella no “tuviera que preocuparse por nada”.
Lo único que no puede atender, al menos por ahora, es a sus cinco perros, para lo cual también su novio tomó algunas previsiones.
El Dr.Javier Gutiérrez, el ortopedista que la operó, aclaró ayer que lo único que le prescribió a su paciente fue un analgésico por “si llegara a necesitarlo”, como también un “antitrombótico” para evitar la formación de coágulos en las piernas.
“Su condición de atleta ha ayudadopara que su recuperación haya sido maravillosa”, agregó el especialista.
Una eventual secuela a la operación es la formación de una “contractura muscular refleja en el cuerpo” la cual desaparecerá en los próximos días.
Hanna, durante estos primeros días, será asistida por su madre, anunció Bryan.
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