Cecilia Vargas regresaba el jueves a su casa, a las 10:30 p.m., en Sabana sur. Mientras intentaba abrir el portón, se percató de que tres sujetos con pasamontañas estaban a sus espaldas.
La encañonaron y le pidieron todas sus pertenencias. Uno de los asaltantes le tocó el cuello para ver si andaba algún collar. Hasta su sombrilla se llevaron.
“Era un sentimiento de impotencia: no pienso, no me muevo. Nada más veía y escuchaba lo que el hombre me decía. Casi que me convertí en un robot”.
Alguna vez pensó cómo actuaría si llegaban a asaltarla. Ahora se siente atemorizada de salir sola, en especial si es de noche.
Al igual que Vargas, uno de cada dos costarricenses vive con miedo de convertirse en víctima de un delito con violencia, según lo reveló un estudio sobre seguridad ciudadana, efectuado por la Corporación Latinobarómetro y presentado el pasado miércoles.
Costa Rica alcanzó el primer lugar en la sensación de inseguridad ciudadana, entre 18 países latinoamericanos. El 38 por ciento de los ticos encuestados indicó haber sido víctima de un delito en el último año y en el 22 por ciento de los casos medió violencia.
La delincuencia se posicionó en el 2011 (cuando se recopilaron los datos) como el principal problema del país. 45 por ciento de los costarricenses que participaron en el estudio así lo consideraron.
En este sentido, solo Venezuela reflejó una peor percepción sobre la seguridad pública.
Pese a que los índices de violencia de Costa Rica son inferiores a los del resto de la región, el país “duplica a Colombia en la creencia de que la delincuencia es el problema principal y la supera en la percepción de inseguridad y de aumento del fenómeno”.
La directora de Latinobarómetro, Marta Lagos, señaló que en Costa Rica “los delitos tradicionales y delincuentes aislados siguen siendo relevantes”.
Autoridades aseguran mejoría
El ministro del ramo, Mario Zamora, discrepa con los resultados del estudio.
Según explicó, encuestas nacionales más recientes y datos judiciales reflejan una reducción de la violencia y de su percepción.
“Hace un año, reafirmé ante ustedes la visión que inspira a mi Gobierno: la de hacer de Costa Rica un hogar más seguro, próspero y digno para todas y todos sus habitantes. Este ha sido el norte que ha marcado nuestra ruta; la ruta de la seguridad humana”, declaró la mandataria Laura Chinchilla en su discurso de rendición de cuentas, el 1.° de mayo anterior.
Aunque la presidenta destacó que los delitos de mayor alarma social –como los homicidios – se han reducido durante su gobierno, el 66 por ciento de los costarricenses encuestados indicaron a Latinobarómetro que vivir en este país es cada día más inseguro.
“Asumimos el Gobierno bajo un marcado deterioro de la seguridad ciudadana”, destacó Chinchilla, quien llegó a la silla presidencial con la promesa de recuperar la tranquilidad de los ticos.
Escasa confianza en la Policía
A pesar de la inversión del Gobierno para capacitar a los oficiales de la Fuerza Pública, Latinobarómetro reveló que 67 por ciento de los ticos tienen poca o ninguna confianza en los cuerpos policiales.
Un agravante es que solo el 15 por ciento de los encuestados dijeron acudir a denunciar luego de un delito.
El subdirector de la Fuerza Pública, Pablo Bertozzi, señaló que la institución atraviesa un momento histórico que se ve favorecido por la percepción ciudadana.
“Lejos de estimularnos, esta encuesta nos motiva a seguir dando lo mejor para convencer de que nuestro trabajo se orienta bajo esquemas y modelos de profesionalismo”, comentó.
Para él, resulta vital ganar la confianza de la población.
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