La mejor palabra que puede describir a la modelo nacional Wendy Myrie es trotamundos.
Ella viajó en junio pasado al Viejo Continente y ya se acomodó a la vida, a la comida, costumbres e incluso el amor le sonríe, pues es novia de un musculoso serbio.
Ella partió en junio pasado a Barcelona a trabajar en una franquicia de restaurantes napolitanos. “Ahí dirigí y me encargué de toda el área operacional, como marketing, personal, alineamiento financiero de un nuevo restaurante ubicado en la zona más turística, exclusiva y nueva de la ciudad llamada Puerto Olímpico”, manifestó.
El mal estado económico de ese país hizo que ella buscara nuevos horizontes.
“El trabajo cada vez era más difícil porque la gente ni consume. Me salió una muy buena oportunidad en Suecia y viajé a realizar la entrevista, acepté la propuesta y renuncié. Me mudé a Suecia y aquí por medio de un amigo en común conocí al que actualmente es mi novio”, contó la joven.
Tuvo la suerte de que él es multimillonario, pues es dueño de tres grandes compañías.
“Me mudé con él, así que prácticamente estoy como en casa, prácticamente, pero todavía no”, bromeó. Ella tiene ya seis años de que salió del país, primero estuvo en México y luego Miami.
Ella contó que está muy feliz porque tiene novio. “Hace unos días conocí a mi suegra y cocinamos juntas, fue una mezcla entre Caribe y recetas serbias”, manifestó Myrie.
También se ha dedicado a viajar. “Antes de venirme aquí anduve por Madrid parte de España, Ibiza, Francia, Noruega, Dinamarca , Grecia e Israel, un lugar que siempre quise conocer y hacer el recorrido que nuestro Señor hizo”, contó y sus fotos en el Facebook lo testifican.
Su metas son más grandes. “Cruzar el continente lo lleva a adquirir una gran experiencia, más amplia en otros estilos y gustos y mi próxima meta es abrir mi propio restaurante”.
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