“Temo por mis alumnos”

La escuela Rosario Vásquez en Juanilama de Esparza es una de las beneficiarias directas de las obras sociales que la empresa Alunasa acostumbra realizar en el cantón.

Meilyn Arroyo, directora del centro educativo, expresó que han recibido mucha ayuda de los venezolanos.

“Nos arreglaron el cableado eléctrico, los baños, pintaron las aulas, donaron ventiladores y gracias a ellos hay hasta un colegio a distancia, donde estudian los empleados que quieren sacar el bachillerato”, expresó.

“Si los padres de familia se marchan a otros lugares para buscar trabajo, se llevarían a los niños con ellos y podemos quedarnos con muy pocos alumnos. Imagínese lo que pasaría con las maestras que tengo a cargo, que son tres, una conserje y la cocinera”, añadió la educadora.