Herbert Arley
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En el corazón de San José, hoy modernizado por los cambios del siglo XXI, se encuentra una de las joyas, de gran valor histórico y patrimonial, que detiene a más de uno a admirar el acabado de su fachada.

Se trata del antiguo Teatro Variedades (hoy sala de cine), que tiene larga trayectoria e historia, así como un imborrable desfile de personajes y artistas internacionales y costarricenses.

Se fundó en 1892 como teatro alternativo para proyectar obras y eventos culturales, con la participación de artistas como “Melico Salazar”, en 1906, cuya presentación fue todo un éxito.

Ese mismo año comenzaron a proyectarse las primeras películas mudas en las que actuaban los inolvidables Harold Lloyd y Charles Chaplin. Las entradas costaban desde 15 hasta 25 céntimos de colón en Luneta y galería. Curioso era que se contrataba un pianista para musicalizar el fondo del cine mudo.

En el 2005, la familia Jinesta Urbini retomó la administración del Variedades y para atraer al público realizó una gran inversión para mejorar el escenario.

Además, se incorporó un sistema de luces para teatro y música, con el fin de brindar la alternativa de entretenimiento diverso a precios cómodos. La sala tiene una capacidad para albergar un total de 496 personas.