El cadáver de un bebé de unas dos semanas de nacido, con gorro y pijama blanca, fue abandonado la tarde de ayer en un lote baldío ubicado junto al puesto de la Fuerza Pública en Cristo Rey, distrito Central de San José.
Se trata de un niño de tez blanca y con escarpines, según confirmó el capitán Gilberto Barrientos, jefe de la Fuerza Pública.
Precisó que no presentaba lesiones visibles y estaba envuelto en una cobija blanca.
Fue localizado por un indigente de apellido Guzmán, quien acudió de inmediato a las autoridades para dar la alerta. “Al ser revisado en los archivos, descubrimos que tenía una causa pendiente por robo agravado y entonces lo detuvimos”, agregó Barrientos.
Guzmán, sin oficio conocido, fue remitido poco después a la sede central del Organismo de Investigación Judicial (OIJ).
Las autoridades judiciales no habían logrado dar ayer con los padres del bebé fallecido. El lote donde apareció es frecuentado por muchos adictos al crack y alcohólicos, entre ellas mujeres.
