Domingo 27 de mayo de 2012, Costa Rica

Científico

Albert Einstein

Por Neyssa Calvo Achoy

ncalvo@aldia.co.cr

Es uno de los personajes más relevantes de la historia y la ciencia por sus descubrimientos científicos que cambiaron el concepto del universo, el espacio y el tiempo.

Albert Einstein era un hombre tremendamente despistado, inconformista, ambicioso y muy consciente de sus dotes excepcionales. Sin olvidar su pasión no solo por las matemáticas, sino también por el sexo.

De chiquillo además de gordo, tuvo dificultades para hablar y le costaba construir frases enteras. Al punto que sus padres temían que sufriera algún tipo de retraso mental, pero a los 9 años, comenzó a hablar con normalidad.

Se casó con Milava Maric en 1.900 y con ella tuvo dos hijos, se divorció y volvió a contraer nupcias con su prima Elsa Einstein, separada y con dos hijas, según abbcpedia.com

Hasta el día de su muerte fue fuerte e independiente, pues decidió dejar este mundo con “elegancia”.

En abril de 1955 sufrió una hemorragia interna causada por la ruptura de un aneurisma de la aorta abdominal que había sido reforzada quirúrgicamente en 1948. Sin embargo, rechazó la cirugía para salvar su vida y se justificó diciendo: “Quiero irme cuando quiero. Es de mal gusto prolongar artificialmente la vida. He hecho mi parte, es hora de irse. Yo lo haré con elegancia”, según el sitio www.taringa.net.

Falleció a los 76 años en un hospital de Nueva Jersey, se dice que durante la autopsia el patólogo del hospital extrajo sin permiso su cerebro para conservarlo, con el fin de algún día descubrir el secreto de su inteligencia.

Vida de un genio

Primeros años

Nació el 14 de marzo de 1879 en el seno de una familia judía y murió el 18 de abril de 1995. Su padre Hermann trabajaba como vendedor y tuvo que enfrentar grandes fracasos económicos.

Paso a la fama

En los años 20, Einstein era reconocido a nivel mundial por sus teorías, pero la más debatida fue su teoría de la relatividad y es considerado el “ padre de la bomba atómica” aunque abogó en sus escritos por la paz.

Una brújula despertó su interés por la ciencia y ocurrió cuando Einstein tenía cinco años de edad y se encontraba enfermo en la cama.

No aprobó su examen de ingreso a la universidad. Superó las pruebas de ciencias y matemáticas pero suspendió otras como historia, idiomas y geografía.