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Este partidario de Jean Bertrand Aristide lloraba ayer en las afueras del Palacio Presidencial, en Puerto Príncipe, después de que el mandatario dejó su cargo.
/Al Día
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Se fue Aristide
Puerto Príncipe / AFP. El presidente haitiano, Jean Bertrand Aristide, renunció ayer a su cargo y salió del país hacia un destino incierto. Atrás quedó una capital a merced de bandas armadas y de una multitud dedicada al saqueo.
La atmósfera reinante era de anarquía violenta con jóvenes armados de pistolas, fusiles y machetes como protagonistas.
Los saqueos se multiplicaron desde la mañana: por las calles llenas de basura y restos de barricadas podía verse a cientos de haitianos corriendo de un lado a otro cargando bolsas de trigo o azúcar.
Eso ocurría mientras algunos edificios estaban en llamas, incluso frente al palacio presidencial, desde donde Aristide salió rumbo al exilio.
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Con palos, machetes, y otras armas, muchos haitianos celebraron la partida de Aristide.
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Policías armados y agentes estadounidenses se instalaron en las oficinas del primer ministro Yvon Neptune. Allí, el presidente de la Corte de Casación de Haití, Boniface Alexandre, prestó juramento y, como lo señala la Constitución, asumió el poder de manera interina. En el acto estuvieron el embajador estadounidense, James Foley, y del embajador francés, Thierry Burkard.
Alexandre pidió calma a la población y se comprometió a que la ley sea respetada.
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Puerto Príncipe, la capital de Haití, quedó en manos de grupos armados y saqueadores.
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Rumbo al exilioDespués de muchas especulaciones sobre el país que le otorgaría asilo al expresidente, por la tarde se supo que éste irá a África.
Por la mañana, el Gobierno costarricense informó que varios “países amigos” habían solicitado el asilo y que, en caso de que el expresidente lo pidiera se le daría. (Vea nota aparte).
Ricardo Toledo, ministro de la Presidencia, informó que desde las 6 a.m. el Ejecutivo recibió, a través de sus representantes diplomáticos en San José, la petición para conceder el asilo.
Sin embargo, el canciller interino, Rogelio Ramos, agregó que a las 10.50 a.m. los mismos países le comunicaron al Gobierno tico que Aristide había preferido ir “a otro lugar”.
Ayer mismo, el presidente estadounidense George W. Bush ordenó la partida de un contingente de infantes de marina hacia Haití “como elemento de vanguardia de una fuerza internacional interina”, y llamó a los haitianos a terminar con la violencia y darle “una oportunidad” al diálogo político.
El Consejo de Seguridad de la ONU tenía previsto reunirse anoche para autorizar el despliegue de una fuerza internacional en Haití. La composición y modalidad de dicha fuerza se desconocen aun.
País iba a recibirlo Pablo GUERÉN/ Al Día
pgueren@aldia.co.cr
La de ayer fue una mañana agitada para el Poder Ejecutivo y la diplomacia costarricenses. Tras la petición de varios “países amigos”, el presidente Abel Pacheco accedió concederle asilo político a Jean Bertrand Aristide, quien renunció a su cargo como mandatario de Haití y abandonó la nación.
Sin embargo, a última hora, Aristide prefirió viajar a “otro lugar”. Toda esta información fue confirmada a Al Día por el ministro de la Presidencia, Ricardo Toledo, y el canciller interino, Rogelio Ramos.
Según Toledo, desde las 6 a.m. el Ejecutivo recibió, a través de sus representantes diplomáticos en San José, la solicitud de distintos “países amigos” para conceder el asilo.
Aunque el ministro no especificó cuáles países formularon esta petición, altas fuentes indicaron que se trató de Estados Unidos y varios de la Comunidad del Caribe (CARICOM), a la que pertenece Haití. Llamadas a MiamiTras recibir la petición, las llamadas, valoraciones y conversaciones a lo interno del Gobierno se sucedieron entre Costa Rica y Miami, donde Pacheco disfrutaba ayer de su último día de vacaciones, antes de partir hoy hacia Madrid, última escala de su gira internacional que ya lo llevó a Colombia, México y Nueva York.
En Costa Rica, Toledo y Ramos también analizaban el asunto con la presidenta en ejercicio, Lineth Saborío. Empero, la orden de Pacheco fue clara para aceptar el asilo al exlíder haitiano. “El Presidente dijo que si el señor Aristide pedía el asilo, se le daría de inmediato por una cuestión humanitaria y de derechos humanos”, dijo Toledo.
Sin embargo, Ramos confirmó que a las 10.50 a.m. los mismos “países amigos” volvieron a comunicarse con el Gobierno tico, para informar que Aristide había preferido ir “a otro lugar”.
Toledo ratificó que la posibilidad de que Aristide viniera a Costa Rica, se valoró internacionalmente luego de las palabras pronunciadas por Pacheco el viernes tras reunirse en Nueva York con el secretario general de las Naciones Unidas, Koffi Annan.
En esa oportunidad Pacheco consideró que “la mejor opción” para Aristide en medio de la crisis de Haití era “la renuncia”.
Destino, el exilio
París / AFP. El presidente haitiano, Jean Bertrand Aristide, que dimitió ayer y dejó su país es el quinto jefe de Estado de América Latina y el Caribe obligado a abandonar el poder desde el 2000 hasta la fecha.
ECUADOR, enero del 2000: Jamil Mahuad es derrocado por un golpe de Estado tras seis días de manifestaciones indígenas en las calles de Quito en protesta por la crisis económica y social.
PERÚ, noviembre del 2000: Destitución de Alberto Fujimori después de diez años en el poder, tras un escándalo en el que está implicado el exjefe de los servicios de inteligencia, Vladimiro Montesinos.
ARGENTINA, diciembre del 2001: Fernando De la Rúa presenta su dimisión tras una ola de protestas populares duramente reprimidas, que se saldaron con la muerte de 27 personas, centenares de heridos y miles de encarcelados.
BOLIVIA, octubre del 2003: Gonzalo Sánchez de Lozada dimite tras una fuerte movilización popular en contra de un proyecto de exportación de gas natural vía Chile, que perjudicaría enormemente al paÍs.En un mes, las manifestaciones provocaron la muerte de más de 80 personas.
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