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Los habitantes de Jomusa de Upala exigen que se les aclare los términos de la nueva división territorial entre Nicaragua y Costa Rica. Foto Ilustrativa/Al Día
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¿De qué país somos?
Upaleños piden explicaciones Elsa ROJAS, corresponsal
Ciudad Quesada.- A cerca de 500 finqueros los tomó por sorpresa la noticia de que sus terrenos están parte en nuestro país y el resto en Nicaragua, debido a la reciente colocación de mojones en la frontera norte.
Esta situación preocupa a los propietarios de terrenos, quienes solicitaron a la Municipalidad de Upala que les ayude a solucionar, o por lo menos entender, lo que sucede.
Por tal motivo, el próximo viernes a la 1 p.m., se realizará una reunión en el ayuntamiento upaleño, donde el director del Instituto Geográfico Nacional, Eduardo Bedoya, y representantes de la Cancillería conversarán con los vecinos afectados.
El alcalde de Upala, Juan Acevedo Hurtado, señaló que los afectados son quienes más interés tienen en este encuentro, y ellos le solicitaron a la municipalidad que invitara a la representación del Instituto Geográfico Nacional.
Aunque la colocación de estos mojones es reciente, se basan en la demarcación de la línea divisoria que nuestro país y Nicaragua acordaron en 1993.
Los vecinos de las comunidades upaleñas afectadas por la situación del nuevo amojonamiento, nombraron una comisión que trabaja en la elaboración de un listado de los perjudicados y la porción de tierra que estarían perdiendo.
En 1994, el trazado de la línea divisoria dejó las tierras y casas de 35 familias de Jomusa de Upala en el lado nicaragüense. En esa ocasión, hasta la escuela del pueblo quedó en territorio extranjero.
Para los pobladores de esos territorios, la situación es muy grave, pues en el sector que se ubica en Nicaragua, tienen cultivos y ganado, que requieren comercializar en suelo costarricense, con el resto de su producción.
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