Mundial de Atletismo

Reina mojada

La cubana Calatayud sorprendió en 800 metros, bajo la lluvia de Helsinki

HELSINKI / AFP La cubana Zulia Calatayud, que ganó los 800 metros, y el estadounidense Bershawn Jackson, campeón de 400 vallas, fueron los héroes de una jornada del Mundial de atletismo pasada por agua.

El tercer título se lo llevó el qatarí de origen keniano Saif Saaeed Shaheen, en 3.000 obstáculos.

Si Zulia Calatayud dio la primera medalla de oro a Cuba en este Mundial y una alegría a Latinoamérica, la cruz llegó con el dominicano Félix Sánchez, campeón del mundo de 400 vallas en las dos anteriores ediciones, que abandonó con una lesión muscular, tras superar el primer obstáculo de la prueba.

Otro protagonista de la jornada fue la lluvia, ya que el Mundial se convirtió ayer durante hora y media en el de "natación", debido a una voraz tormenta que encharcó el Estadio Olímpico e hizo que la jornada se suspendiera durante dos horas.

Zulia Calatayud, al ganar la prueba de 800 metros, tomó el relevo de otra reina de la distancia, su compatriota Ana Fidelia Quirot, dos veces campeona mundial, en 1995 y 1997.

La atleta de 25 años sorprendió a sus rivales, ganando la prueba con un tiempo de 1:58.82, mientras que la favorita rusa Tatyana Andrianova fue tercera (1:59.60), y la plata se la llevó la marroquí Hasna Benhassi (1:59.42).

Calatuyud ofreció a Cuba la decimoquinta medalla de oro en el historial del Mundial y mantiene la tradición de especialistas cubanos en 800 metros.

Pero Calatayud no quiere que la vean como la sucesora en la distancia de Ana Fidelia Quirot o del mítico Alberto Juantorena.

"Sólo quiero que me vean como una atleta que ha dado alegrías a Cuba", dijo.

Calatayud logró a sus 25 años el oro, después de estar dieciocho meses sin competir, entre 2002 y 2003, debido a dos fisuras en el peroné derecho y en el izquierdo, por lo que este triunfo, en Helsinki, es más dulce.

El estadounidense Bershawn Jackson, que había sido descalificado en la primera ronda del Mundial de París-2003, ganó la medalla de oro en 400 m vallas con su mejor marca personal (47.30).

La presea de plata fue para su compatriota James Carter, que también hizo récord personal con 47.43, mientras que el japonés Dai Tamesue fue bronce, con 48.10.

El dominicano Sánchez, rey de la prueba, que había corrido las series y las semifinales con una fractura en el pie derecho, participó en Helsinki contra el consejo de su médico. La carrera fue horrible para Sánchez, ya que tras ser ser advertido por una salida falsa, se vio obligado a abandonar tras superar la primera valla.