Lunes 13 de junio, 2005. San José, Costa Rica.


Envíele sus mensajes al pequeño Jean Paul
Vote por los más atractivos de la tv nacional

Humor en Al Día


Tribuna libre

Pesimismo y apatía

Gloria Bejarano

Durante casi 34 años he recorrido Costa Rica, y nunca percibí un clima de tanta incertidumbre, duda y pesimismo como ahora.

En esos recorridos pude aquilatar este pueblo en todo lo que vale, y reconocer aquello que lo hizo ser diferente. Hoy me angustian su desánimo, falta de entusiamo y pérdida de fe.

Las conquistas de los costarricenses son el resultado de una combinación única: la pasta con que fueron hechos los ticos, y los dirigentes que los han guiado a través de los años. Juntos forjaron esta nación y han construido Costa Rica.

Es cierto que nuestros líderes políticos, religiosos, deportivos, empresariales y sindicales han cometido errores, pero también es verdad que sus aciertos han sido muchos y no pueden ser ignorados. No por casualidad, Costa Rica ha sido ejemplo en la región y en el mundo. No somos una mera eventualidad ni, mucho menos, producto del azar. Quienes así lo creen, no han sabido leer el alma de este pueblo.

Costa Rica, pese a sus problemas y limitaciones, tiene la capacidad de afrontar retos, y así lo demuestra su historia. Pero necesita liderazgo para crear una visión positiva de futuro, así como una adecuada dosis de inspiración, fe, deseos de superación, orgullo, confianza y seguridad.

El liderazgo, sin embargo, no se puede improvisar, nace de la necesidad del pueblo de ser guiado, y se concreta cuando una persona es capaz de interpretar sus aspiraciones, de inspirarlo y conducirlo hacia metas comunes y sueños compartidos. El verdadero líder surge de las entrañas de un pueblo alimentado con la esperanza, y no se puede simplemente inventar, fabricar o autoproclamar.

Los demás elementos como orgullo, confianza, seguridad o deseo de superación están latentes en todo ser humano, pero germinan solo cuando existe un clima de positividad y el pueblo, optimista, quiere luchar por su futuro.

Costa Rica necesita una inyección de optimismo, ilusión y confianza en nuestra gente, y de esperanza en el futuro. Necesita pasión y compromiso de todos, y que el encono sucumba ante el amor por esta tierra.

Pero nada de esto será posible mientras no se rompa el clima de permanente controversia y negatividad que nos mantiene sumidos en el pesimismo, la desconfianza y la apatía. Ese clima que se han empeñado en construir quienes se gozan en señalar todo lo malo, ignorando lo bueno, y siembran suspicacia y temor.

| PORTADA | NACIONALES | SUCESOS | OPINIÓN | SOCIEDAD | OVACION |
| INTERNACIONALES | SERVICIOS | USTED OPINA | PURA VIDA | ESCRIBANOS |

© 2005. Periódico Al Día. El contenido de aldia.co.cr no puede ser reproducido, transmitido ni distribuido total o parcialmente sin la autorización previa y por escrito del Periódico Al Día. Si usted necesita mayor información o brindar recomendaciones, escriba a webmaster@aldia.co.cr