43 vuelos afectados entre el miércoles y anoche

Juan Santamaría está colapsado por niebla

Hasta la Selección de Estados Unidos fue desviada a Panamá

La espesa niebla que cubrió el aeropuerto internacional Juan Santamaría, la tarde y noche del miércoles, y ayer, impidió el aterrizaje y despegue de, al menos, 43 vuelos, incluido el de la Selección de Fútbol de los Estados Unidos, que debió desviarse a Panamá.

La poca visibilidad en la terminal aérea obligó a cerrarla, ambos días, a partir de las 4:30 p.m. El miércoles, se cancelaron ocho vuelos; y ayer, unos 35.

Miles de usuarios se quedaron con las maletas listas. Algunos tuvieron que dormir en la terminal área o se devolvieron a sus casas u hoteles.

En estos casos, por lo general, las aerolíneas no se responsabilizan de los retrasos ni pérdida de conexiones.

"Esperábamos a un familiar que venía de Venezuela, y tenía que llegar a las 5:20 p.m. El problema es que mañana (hoy) iba para El Salvador", afirmó Manuel Merino, cuando se disponía a regresar a su casa.

Otros no llegaron a tiempo a sus reuniones, perdieron un día de sus vacaciones o el entrenamiento, como la Selección de Estados Unidos. Los aviones que no pudieron aterrizar ni el miércoles ni anoche, se desviaron a Panamá, Nicaragua o Liberia, según conveniencia de cada línea aérea. Y es que los bancos de niebla que cubrían el aeropuerto, redujeron la visibilidad a solo 100 metros. El mínimo permitido para el aterrizaje o salida de los aviones es de 1.200 metros de distancia y 250 pies de altura.

Esta condición del tiempo es típica de esta época del año.

Según la meteoróloga Irina Katchan, esta situación se presenta, debido a las bajas presiones en el mar Caribe y los vientos del océano Pacífico, que traen mucha humedad. La niebla ha cubierto casi todo el Valle Central y, principalmente, las partes altas.

Esa condición podría mantenerse hasta principios de la próxima semana.

Fernando Lara, gerente de operaciones de Alterra, explicó que la mayoría de las aerolíneas, aterrizan en la noche y salen a la mañana siguiente. Como no llegaron el miércoles, arribaron ayer y retrasaron las salidas. Hoy se repetirá la historia.