Contraloría General le da diez días

IDA obligado a vender su finca de recreo

La "Finca Hitachi", en San Rafael de Ojo de Agua, que por 7 años ha utilizado el IDA como un centro para recreación de sus empleados, deberá ser vendida en forma inmediata.

La Contraloría General de la República le otorgó a la junta directiva de esa entidad, diez días, para acordar la actualización de los avalúos de la propiedad y proceder a su venta.

En 22 días más deberá esa junta rendir un informe sobre el avance de dichas gestiones.

Los recursos que esa transacción genere serán destinados para financiar la compra y distribución de tierras, su parcelación y el desarrollo de asentamientos.

Al Día intentó conocer la versión del presidente del Instituto, Gerardo Vargas, pero en su oficina se informó que estaba en Casa Presidencial. Tampoco contestó a un correo electrónico enviado a su oficina.

El órgano contralor además llamó la atención a los directivos del IDA porque la mencionada finca fue dividida en dos y, porque desde que se compró ha sido destinada a fines distintos a los objetivos de la institución. Concretamente, "se ha utilizado como centro de recreación de los empleados del IDA, a pesar de que ello constituye un uso ilegal de los recursos públicos invertidos en ese inmueble".

La finca de 6,7 hectáreas de extensión tiene dos casas, piscinas, rancho para actividades y canchas de fútbol y de baloncesto.

La reprimenda de la Contraloría surgió porque el Instituto planteó utilizar esos terrenos, para instalar un ambicioso "Centro de capacitación en producción agrícola de alta tecnología para productores del IDA y del Sector Agropecuario".

El costo de ese proyecto ascendía a ¢812 millones en los tres primeros años y no se garantizaba que generaría los recursos necesarios para autofinanciarse.

El ente contralor detalló que el plan es improcedente por cuanto el IDA no tiene competencia para desarrollar un proyecto de este tipo si no es aprobado por ley.