Entrenador Rubén Romano liberado en México

Estuvo dos meses con ojos vendados

MÉXICO / AFP. El entrenador argentino Rubén Omar Romano estuvo al corriente de las victorias de su equipo Cruz Azul, durante los 65 días en que estuvo secuestrado, según narró el propio técnico en una rueda de prensa, 24 horas después de su liberación.

"Del equipo estaba enterado de cómo iba, porque escuchaba todos los partidos, no los veía porque no me dejaban, pero los oía", dijo el argentino Romano.

El técnico, de 47 años, cuyo secuestro el 19 de julio conmocionó a México, lució afeitado, de aspecto cansado, conmovido en ocasiones, pero tranquilo, tras una noche sin dormir.

Su equipo, Cruz Azul, es líder del campeonato de liga. El pasado sábado derrotó a los Tigres de Monterrey 2-1.

Romano se pasó más de dos meses con los ojos vendados, tirado en una colchoneta, en una casa en el sur de la capital mexicana.

Siete secuestradores, cuatro hombres y tres mujeres, fueron capturados en la operación policial de la Procuraduría mexicana, en la noche del miércoles

"El trato que recibí no fue malo", dijo Romano.

"Siempre estuvieron atentos a que tuviera mi comida, mis cigarrillos", aseguró.

Los secuestradores pertenecen a una banda conocida como Los Canchola, dirigida por José Luis Canchola, que está en la cárcel de Santa Marta Acatitla desde enero del 2004.

"Sentí temor cuando escuché los golpes", narró el entrenador, al describir su liberación.

"Sé que estoy un poco aturdido en estos momentos", reconoció Romano, uno de los técnicos más reconocidos en México.