Cinco candidatos rezan para salir victoriosos hoy en votación por la Presidencia

Nicas urgen de ayuda

Población vive agobiada por la pobreza, el desempleo y la falta de atención médica

AFP, EFE y AP.- El candidato que hoy gane las elecciones en Nicaragua, tendrá como reto crucial atender los problemas de uno de los países mas pobres del continente, atraer la inversión privada y generar empleos.

Informes del Banco Mundial indican que el 70 por ciento de los 5,4 millones de nicaragüenses vive con menos de $2 al día, y que el 35 por ciento se encuentra en la extrema miseria.

Para subir el nivel de vida, el nuevo gobierno necesitaría abrir numerosas fuentes de trabajo, un reto que ninguno de los gobiernos anteriores ha podido cumplir por la baja actividad productiva e industrial del país.

Problemas en todo lado

Según el sociólogo Cirilo Otero, más de 2,2 millones de nicaragüenses está sin empleo, y otro buen porcentaje tiene bajos salarios que no alcanzan para compran los alimentos básicos.

El salario mínimo que devenga, por ejemplo, un empleado de limpieza es de $70 (¢36.400), insuficientes para comprar la canasta básica, valorada en $163.

La falta de trabajo ha llevado a Nicaragua a registrar situaciones de hambruna, y el índice de desnutrición es del 27 por ciento, el más alto de Centroamérica.

Se requiere, además, mejorar la infraestructura vial y hacer algo con el analfabetismo, que ronda el 30 por ciento: se necesitan 30 mil maestros, y unos 800 mil niños y adolescentes quedan anualmente fuera del sistema escolar.

Para cambiar este panorama, habría que duplicar el presupuesto en educación y mejorar la calidad de la enseñanza, lo que llevaría, al menos, 10 años.

Enfermos sin ayuda

Los problemas de salud no se quedan atrás, ya que es muy bajo el porcentaje de la población que recurre al sistema de salud, por no tener dinero para pagar exámenes o medicamentos.

A esto se suma la urgencia de ampliar las redes de agua potable, que actualmente cubren solo a dos tercios de la población, y buscar una solución a la crisis energética que provoca apagones.

Los candidatos

Un total de 3.665.141 nicaragüenses están convocados para estas elecciones, en las que, además, elegirán un vicepresidente, 90 diputados nacionales y 20 del Parlamento Centroamericano.

Daniel Ortega, enemigo jurado de Estados Unidos, acude como el favorito. En los últimos sondeos, Ortega iba a la cabeza con alrededor del 33 por ciento de preferencia, seguido de Eduardo Montealegre (Alianza Liberal), José Rizo (Liberal Constitucionalista), Edmundo Jarquín (Renovación Sandinista) y Edén Pastora (Alternativa para el Cambio).

Con posibilidad de ganar Ortega Daniel Ortega El expresidente del Frente Sandinista de Liberación Nacional encabeza la intención de voto. Se postula por quinta vez, tras perder los comicios del 2001. Promete reconciliación y beneficios para los pobres, “cero desempleo, cero corrupción, cero apagones, subsidios, préstamos, salud y educación gratuita”. Montealegre Eduardo Montealegre El excanciller y banquero de Alianza Liberal le pisa los talones a Ortega. Es favorito del empresariado nica y basa su plan de gobierno en el acuerdo comercial con EE. UU. y en la inversión privada extranjera. Propone crear 500 mil nuevos empleos en cinco años, y explotar los recursos naturales para generar energía renovable.

Seguridad intensa Soldados custodiaban el viernes, las afueras del estadio Denis Martínez. EFE Más de 33 mil efectivos integrarán el dispositivo de seguridad con motivo de las elecciones presidenciales, anunció el saliente mandatario Enrique Bolaños, quien prometió mano firme para prevenir la violencia durante y después de los comicios. “No queremos disturbios ni tomas de centros de cómputos del Consejo Electoral. Vamos a ser firmes para proteger a la población”, agregó. Bolaños confía en la inteligencia y patriotismo de la población para acudir masivamente a las urnas y escoger a quien lo sustituirá en enero del 2007. Asimismo, llamó a los ciudadanos a que esperen con paciencia en sus casas por los resultados de la votación y a respetarlos.