En Limón

Hombre lo apuñaló por creer que se le coló en la fila

Lo hirió 7 veces en la panza, mientras otro le disparaba

Limón. - Un hombre de apellido Ortiz esperó junto a un guarda privado, en el parqueo del Maxi Bodegas de Limón, a Manuel Alberto Jirón Víctor, de 38 años, y lo apuñaló en siete ocasiones en el abdomen, porque creyó que se le coló en la fila para pagar.

La brutal agresión ocurrió el 25 de octubre anterior, cuando Jirón al llegar a la caja del supermercado con unas galletas y unas tortas que acababa de tomar de las urnas se percató que había olvidado algo, informó el OIJ.

Por ello dejó los alimentos al lado de la registradora y volvió a los pasillos. Cuando halló lo que necesitaba volvió a la caja a pagar.

Sin embargo, Ortiz quien permanecía en la fila creyó que Jirón se le estaba “colando”, le reclamó y, surgió una discusión.

La cajera, para evitar un problema mayor atendió primero a Ortiz, pero cuando Jirón salió del supermercado se percató que lo esperaban y que lo acompañaba un guarda de apellido Granados.

Este último, con el ánimo de amenazarlo, según la policía, disparó al aire mientras que Ortiz aprovechándose del desconcierto de Jirón lo apuñalaba.

No llegó nunca

Jirón, quien se ganaba la vida como transportista, había trabajado todo el día y no llegó a la casa sino hasta muy entrada la noche, recordó ayer Maribel Fernández, la compañera sentimental con quien convivió durante 19 años.

“Ese día le pagaron por unos trabajos de mecánica. Lo primero que hizo fue bañarse y agarrar la bicicleta para ir a comprar algunas cositas para la comida”, recordó ayer la señora con la que tuvo una hija. Ella además tienen un hijo.

Esa noche, agregó, pasé preocupaba y pegada a esa ventana porque nunca llegó. Al día siguiente, le pedí a mi hijo, de 19 años, que llamara a la policía para ver si, por alguna confusión, lo habían detenido durante las manifestaciones por la huelga en JAPDEVA.

Jirón no aparecía entre la lista de detenidos pero si como paciente en el hospital Tony Facio.

“Le dieron siete puñaladas... No tuvieron compasión... Lo dejaron tirado en el suelo como un perro”, afirmó la señora Fernández de acuerdo con el relato que le hizo Jirón cuando lo visitó por primera vez.

Ortega, el guarda, también habría intentado dispararle a los testículos, dijo.

Los primeros días Jirón mantuvo una condición estable. De un día a otro, su condición comenzó a complicarse a punto de que debieron someterlo a una intervención quirúrgica que no pudo soportar.

“Fue muy trabajador, tenía buenas recomendaciones. Lo recordaré como buen padre y esposo y, sobre todo, como una persona muy honesta”, dijo ayer.

La víctima Manuel A. Jirón. Edad: 38 años