![]() |
||||
Portada ![]() ![]() ![]() ![]() ![]() ![]() ![]() ![]() ![]() ![]() ![]() |
||||
|
Pido la palabra Lo mismito Roxana Zúñiga Quesada, periodistaropazu@racsa.co.cr A veces las leo y oigo con “una sonrisa en los labios”. Otras, con “lágrimas en los ojos”. La mayoría, con un “mal gusto en la boca” o un “zumbido de zancudo hambriento en mis oídos”. Se trata de esas preguntas y frases que mudan de piel lingüística cada cierto tiempo, pero que, en el fondo, siempre recalcan lo mismo. Ya se trate de una desnudista, un actor, un ingeniero, un minusválido, un futbolista, una cantante, un chancero, un payaso o un largo etcétera, la incómoda interrogante siempre aparece en las entrevistas. La primera es la chocante y empalagosa “¿qué siente...?”, si le roban el carro, la pareja, la casa, el anillo, el celular, la paz y la inocencia. “¿Qué siente...?”, si su obra triunfa, se gana la lotería, consigue un beso de Shakira, recibe un premio Nobel, el Papa lo invita a Roma, le heredan Las Vegas, Bill Gates lo mete en el testamento. Pero ¿QUÉ VOY A SENTIR, sino alegría, gozo, felicidad? La segunda es “¿qué significa...?”, si le publican un libro, le otorgan un premio mundial, lo ascienden a gerente, le asignan una pensión vitalicia a los 30 años, le dan un vehículo de lujo con gasolina, mantenimiento, extras y revisión técnica gratis. Pero ¿QUÉ VA A SIGNIFICAR, sino encanto, maravilla, contento? Y yo lo SIENTO, pero esto SIGNIFICA una crítica y no tan solo una reflexión periodística. |
![]() ![]() ![]() ![]() ![]() ![]() ![]() ![]() ![]() ![]() ![]() ![]() ![]() ![]() |
© 2006. Periódico Al Día. El contenido de aldia.co.cr no puede ser reproducido, transmitido ni distribuido total o parcialmente sin la autorización previa y por escrito del Periódico Al Día. Si usted necesita mayor información o brindar recomendaciones, escriba a webmaster@aldia.co.cr . Diseño del sitio: Juan Pablo Carranza |