“Una cosa lleva a la otra”

“La drogadicción es como un ladrón, callado y sigiloso. Por eso, de un momento a otro, logra atrapar a la persona entre sus garras”.

De esta forma, Mónica Quesada, de Limón, se refiere a la forma en que ella se hizo adicta, hace dos años.

Todo inició cuando empezó a ir a fiestas y aunque al principio no consumía drogas, se empezó a relacionar con gente que sí lo hacía, “primero tomé licor, después cerveza y de un momento a otro, estaba inhalando cocaína y fumando marihuana”.

“El camino hacia la drogadicción es muy sencillo, una cosa te lleva a la otra, sin que una se dé cuenta”.

Quesada dice que hará todo el esfuerzo posible para que Kylen (11) y Jesy (9) tengan mamá de tiempo completo y por eso decidió internarse de una vez.

“Cuando se convierte en un adicto de tiempo completo, se tira a la calle, se pierde toda la noción de la realidad y hasta se llega a perder el interés por la familia.

“Eso sí, uno piensa mucho en ellos y que algún día estará otra vez bien”.

Quesada dice que hay que saber esperar el momento y por eso, hace 23 días decidió internarse de una vez.

“Yo había escuchado de los Hogares Crea a través de otro adicto”. Añade que “la voluntad es lo más importante para salir adelante.

“Estoy dispuesta a renovar mi vida y educar a mis hijas, siempre hay tiempo para enmendar los errores y recuperar el tiempo perdido por las drogas. Dios me va a ayudar a conseguir mis metas”, confiesa Mónica.