Su abogado podría apelar la sentencia de 10 años

“Yo nunca, jamás quise hacerle daño al bebé”

Ligia Naranjo tendrá que pasar, como mínimo, cinco años en la cárcel, en EE. UU.

El pasado viernes, cuando la puerta del salón de juicio de Boulder (Colorado) se abrió, una a una fueron saliendo seis personas, enfundadas en un traje negro, reservado solo para los prisioneros.

La última audiencia de la tarde fue asignada a la única mujer del grupo, Ligia Naranjo Zúñiga, de 29 años y oriunda de Moravia.

La sala estaba llena de visitantes, abogados, familiares y periodistas, que esperaron con impaciencia varios meses, para conocer cuál sería el destino de esta niñera costarricense, acusada de sacudir violentamente al pequeño Von McLaughlin, y ocasionarle lesiones graves, que lo tuvieron una semana en el hospital.

“Tuvimos mucha suerte de que Von no esté muerto. Y tuvimos suerte de que ella no es lo suficientemente fuerte para haberlo matado”, declaró, entre sollozos, Christina McLaughlin, la madre del niño, mientras su esposo Sean estaba a su lado. ¶

Según los padres de Von, los doctores les dijeron que las lesiones de su hijo eran congruentes con que lo hubieran lanzado por la ventana de un segundo piso.

Ligia afirmó también que nunca quiso dañar al bebé. Sus padres José Luis Naranjo y Ligia Zúñiga, también hablaron ante la corte, con ayuda de un traductor.

Con un semblante triste, José Luis describió a su hija mayor como una muchacha respetuosa, obediente y temerosa de Dios.

Su mamá dijo: “creo que lo que pasó aquí fue un accidente (...). Prometo que siempre voy a rezar por el niño (Von McLaughlin) y sé que será un joven inteligente”.

Tras escuchar a ambas partes, la jueza Care Hoye Enichen eligió la pena más alta que la ley le permitía y condenó a Ligia a 10 años de prisión. La joven y su familia rompieron en llanto.

“Ella no tenía ninguna prueba de descargo. Todo lo que tenía era su versión, contra una prueba técnica de la medicatura forense. Las cortes estadounidenses son muy prácticas y es muy dificil que se dejen llevar por subjetividades”, dijo ayer Wálter Corea, asesor legal de la Dirección de Adaptación Social, en Costa Rica.

En sus propias palabras

En una carta que Ligia le envió desde la prisión de Boulder a su amiga Alejandra Thomas, el pasado 24 de mayo, y que está publicó en Internet, la joven decía: “estoy bien y confío mucho en Dios, que me sacará de aquí muy pronto. Él me ha dado la fuerza que necesito para pasar por esto y toda la gloria va a ser para Él.

“Les quiero agradecer a todos por su apoyo y sus oraciones. No me gusta este lugar y no es fácil, pero Dios no me dará nada que yo no pueda manejar. Así que aquí estoy, tratando de reír tanto como puedo y ser paciente”.

“Si se preguntan: ¿Qué hago aquí? Bueno, sobre todo leer, escribir y dormir para que el tiempo se pase rápido. Sobre leer, por supuesto que La Biblia y ya estoy en mi libro número catorce.

“Mi compañera de celda es muy buena y la pasamos muy bien cuando estamos encerradas; eso es como 16 ó 18 horas al día. Escuchamos música y hablamos mucho. ¡¡La comida!! Mmm...no es muy buena, pero bueno, al menos tengo algo para comer tres veces al día. Es comida caliente”.

Si su abogado, Seth Temin, logra una reducción de la pena, en la apelación que plantearía en unos meses, Ligia tendrá que pasar, al menos, 5 años en Boulder.

Casos duros Febrero/ 1989 Al tico Valentine Pineda lo acusaron de asesinato en Florida. Condenado a muerte en 1988, aún espera en prisión. Agosto/ 2003 Alejandro Méndez estuvo en prisión más de dos años, acusado de matar a su bebé, en Pensilvania. Resultó inocente. Febrero/ 2000 Desde entonces, el exfutbolista Carlos Garro cumple una pena de 30 años de prisión, en Texas, por una violación. Junio/2004 El tico Ronny Zamora quedó libre, tras 27 años en una prisión de Miami. Él fue condenado en 1977 por un asesinato.