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 Vivir H O Y Domingo 24 de septiembre, 2006, San José, Costa Rica.
 

Niños

¿Le cuesta tener amiguitos?

Los papás pueden ayudar a sus hijos a la hora de hacer vida social

Jéssica I. MONTERO SOTO

Todo el mundo sabe que los niños necesitan tener amigos, pero no siempre les resulta fácil y ahí es cuando los papás deben ayudarlos a comenzar relaciones con otros niños.

La psicopedagoga Karina Picado, la consejera de Enfoque a la Familia, Elena Calderón y la psicóloga infantil Natalie Taylor le dan estos consejos para que facilite la vida social de sus hijos pequeños que no tienen amigos.

Solo un guía

Las discusiones entre niños no las deben resolver los papás, sino ayudar a los pequeños a enfrentarlas en sus propios términos.

1- Cuente anécdotas. Recuerde si alguna vez usted o alguien de la familia tuvo problemas para hacer amigos y cómo lo resolvió, así le hará sentir que no está solo y que la situación es normal. Esto le dará seguridad.

2- Hable con la maestra. Solicítele que desarrolle actividades grupales o, si puede, ofrézcase a organizar algunas, en la que los niños tengan oportunidad de compartir y conocerse mejor.

3- Actividades extra. Si las cosas no funcionan con los compañeros, tampoco se pueden forzar. Busque grupos de actividades especiales, para que se relacione con gente diferente.

4- Situaciones especiales. Enseñe a sus hijos a preocuparse por los demás, llamar cuando alguien está enfermo o hacer una tarjeta a mano para quienes pasan un momento difícil

5- Involúcrese. Conozca a los compañeros de sus hijos y a sus padres, si se establece una buena relación entre las familias, dentro y fuera de las actividades escolares, se facilita la interacción entre los niños.

Póngale más cuidado

A los hijos únicos o a los menores muy chineados: piensan que deben recibir la misma atención en la escuela y como no pasa, se frustran.

A los hijos del medio (ni mayor ni menor), porque creen que deben competir por la atención con todos y eso provoca rechazo.

A los niños con problemas de conducta, como agresividad o timidez excesiva.

A los que no están acostumbrado a las manifestaciones de afecto.

A los que tienen características físicas llamativas (obesidad) o discapacidades.

Foto: 1367352
Dejarlos compartir fuera de la escuela es una buena manera de acercar a los niños.
Photos.com

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