Los que ya han partido

03/01/07

Un padre, un abuelo y la nieta, de 3 años, murieron en Parrita cuando volcó el carro en que viajaban.

06/01/07

Un joven de 31 años fue asesinado de 23 balazos cuando salía de un bar ubicado en El Alto de Guadalupe.

08/01/07

Mayeli Flores, de 5 años, falleció en Piedades de Santa Ana, tras ser arrollada por un camión repartidor de leche.

09/01/07

A una pareja, ella de 15 años y él de 24, la hallaron ahorcada en un cuarto de un hotel ubicado en San José.

18/01/07

Un ama de casa fue asfixiada, y luego enterrada, por su compañero sentimental en un asentamiento de Guápiles.

“Lloro cuando veo su ropa en el cuarto”

La familia trata ahora de salir adelante. Rolando AVILÉS

Diez minutos antes de morir, el chequeador de buses, Luis Zúñiga Bertalioni, se devolvió de la entrada de su casa para decirle a su esposa, Guiselle Quesada, que su hija Yuridia, de un año y medio, se había ido tras él, y que tuviera mucho cuidado.

Así, sin saber qué pasaría, Zúñiga se despidió para siempre, pues en el mismo bus en que se subió, encontró la muerte cuando intentaba bajarse.

Tras su deceso, doña Guiselle teme pasar por la “parada de la muerte”.

Ahora la vida se le ha vuelto más dura, pues ella tiene que seguir adelante con sus 13 hijos, a los que alimenta y cuida con lo que gana vendiendo tiempos.

Nieto no olvida a su abuelo

Le llevó un mariachi para despedirlo. Édgar CHINCHILLA

Ayer, mientras permanecía en su trabajo de plantas ornamentales, en Río Cuarto de Grecia, Reinier Arce, de 44 años, trataba de olvidar el accidente que cobró la vida de su abuelo, Francisco Peralta Salazar.

Hoy se cumple una semana de la tragedia, cuando ambos viajaban en un pick up, rumbo a la casa de un primo en el poblado de La Tabla.

“Me sentía culpable y esa noche no pude dormir. Recuerdo siempre cuando el carro nos cayó encima. En mi cabeza había una voz que me decía que había llevado a mi abuelo a matarlo”, afirmó ayer Arce.

Debido a la pérdida de su abuelo, Arce ha sentido, muchas veces, deseos de no ir a trabajar, ya que era muy apegado a don Francisco.