Torremolinos de Desamparados

Muere por escopetazo en confuso incidente

Gerardo Barrientos Rojas murió antenoche tras ingresar agonizante a la clínica Marcial Fallas en Desamparados, luego de un confuso incidente.

Barrientos, de 37 años, llegó a ese centro médico tras recibir un escopetazo en el tórax durante una balacera en Torremolinos.

Dejó huérfanos a cinco hijos, según precisó su padre Fernando Barrientos.

“El paciente sufrió laceración de órganos torácicos como el corazón y los pulmones, producto de una detonación multiproyectil”, expresó ayer el médico que lo atendió, Luis Alberto Monge.

Como sospechoso del crimen figura un nicaragüense nacionalizado costarricense, de apellido Rivera, detenido tras el hecho cuando permanecía escondido en una casa vecina.

El OIJ presume que el caso obedeció a una riña por viejas rencillas personales.

Sin embargo, el padre de la víctima narró que su hijo llegó a visitarlo . “De pronto, (Gerardo) escuchó una balacera y salió a la acera con la idea de ver qué ocurría”, manifestó el progenitor.

Al parecer, su hijo fue herido accidentalmente por un hombre que, borracho y drogado, disparaba indiscriminadamente.

Recordó que antes de que fuera herido de muerte, logró poner a salvo a varios niños que deambulaban por la acera.

“Gerardo le preguntó al tipo que si estaba loco, que tuviera en cuenta que alguien podría resultar afectado”, contó el papá.

No obstante, el nicaragüense se volvió hacia él y aunque Barrientos intentó refugiarse detrás de un carro, al parecer, el sospecho le disparó a corta distancia.

Como parte de esa situación, también hubo disparos contra una radiopatrulla de la Fuerza Pública de Desamparados.

La unidad estaba ocupada por los policías Laura Tenorio y Alexánder Arana, quienes salieron ilesos, dijo la oficial Matilde Marchena, compañera de labores de los agentes afectados.

La víctima Gerardo Barrientos Edad: 37 años