María Fernanda Jiménez, modelo

Lo suyo son las pesas

Esta chica Bésame cuenta sus secretos para mantenerse bella

La modelo Bésame, María Fernanda Jiménez, realiza todo un ritual de belleza para mantener siempre apariencia fresca y cuerpo sano.

Buena parte del tiempo que dedica para verse hermosa lo pasa en el gimnasio donde practica mínimo dos horas de ejercicios. La rutina incluye una hora de pesas tres veces por semana con yoga, pilates o tae-bo.

“Me gusta trabajar pesas para las piernas y los demás ejercicios los hago porque son buenos para el cuerpo, pero no porque me gusten mucho”, confesó Jiménez.

La yoga es otro de sus favoritos debido a su carácter pasivo y ha logrado mucha flexibilidad y fortalecimiento en los músculos.

Entre semana es muy estricta con las dietas y los ejercicios, pero los sábados y domingos ella se da el lujo de comerse unos antojitos y de no visitar el gimnasio.

Con esto de los fuertes aguaceros la modelo contó que cuando se resfría prefiere los remedios caseros.

“Cuando tengo gripe me voy para la casa de mi abuela, para que ella me haga remedios caseros pero cuando ya veo que es demasiado voy a la farmacia para que un médico me examine y me de tratamiento”, detalló la joven.

Sencilla pero bella

Aunque la alajuelense asegura que su cuidado personal se caracteriza por ser sencillo, a la hora que detalla los pasos para cuidar su apariencia nos damos cuenta que no es están simple como ella supone.

Una de las partes que más cuida la modelo es su rostro, por eso sus dos reglas diarias son colocarse bloqueador solar antes de maquillarse y por la noche limpiarse la cara.

A pesar del cansancio y del sueño, antes de dormir Jiménez utiliza 20 minutos para hacer su ritual de belleza.

Primero se lava la cara con un jabón especial de avena, luego lo humecta y coloca crema especial para el contorno de ojos. Por último usa una crema especial para prevenir las líneas de expresión.

La modelo aconseja tanto a hombres como mujeres siempre limpiarse el rostro, aunque no se utilice maquillaje, porque el aire siempre transporta suciedad que al final se acumula principalmente en la piel de la cara.

Jiménez dijo que una mujer no siempre tiene que estar maquillada o andar en tacones para sentirse hermosa.

“Para sentirse bien solo es necesario el aseo personal. Una persona que huela limpio y que su cara se vea descansada genera a su alrededor un ambiente agradable”, concluyó.