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 Vivir H O Y Domingo 09 de septiembre, 2007, San José, Costa Rica.
   

El mundo del fetichismo

Esta forma de sexualidad es una adicción que puede tratarse

Muchas veces ocurre que el varón utiliza esta forma de sexualidad, y se habla del varón porque es lo más frecuente, pero las mujeres también lo practican.

Fetichismo se va a definir como usar ropa íntima de la mujer para obtener placer sexual, llegando a la erotización y eyaculación, pero no solamente observa esta ropa, la utiliza y se viste con con ella para disfrutar de la sexualidad.

Tratamiento

En algunos casos se debe recurrir al tratamiento farmacológico. Eso ayuda a la disminución del fetichismo o la desaparición .

Observar mujeres en campos abiertos como en un mall, el barrio o la calle, de forma libidinosa coloca esta práctica en el campo de las adicciones sexuales.

Efectivamente, existen personas para quienes la excitación sexual o el objeto de su erotismo está en la erección y la eyaculación.

Su deseo resulta casi siempre en lo inalcanzable. Solo observa o practica estas formas de sexualidad por alguna razón.

¿Por qué decir que es una adicción sexual? Porque la enajenación lo separa de la realidad y esto produce un gozo apartado del mundo real.

Muchas veces son varones casados o comprometidos en una relación de pareja.

No se hablará aquí de la homosexualidad porque también los incluye.

Estas practicas sexuales acarrean una serie de dificultades en la vida de pareja, por que la la mayor parte del tiempo las mujeres se dan cuenta.

En mi experiencia profesional me he encontrado con varones que utilizan ropa interior de la mujer para masturbarse.

He visto casos en los que la mujer ha creído que algún flujo vaginal esta en su ropa interior por lo húmedo. Podría pensarse que esta es una aberración, pero no es así. Algunos varones también utilizan calzado con tacones altos y de color rojo, o de charol negro y se presenta la misma situación que con la ropa interior.

Se dice que no es aberrante por el hecho de que el varón se separa de la realidad y obtiene su placer sexual sin tener que compartirla con su compañera y rechaza con desagrado a quien les ama y tiernamente se siente incapaz de “amar”.

Llegan a justificar el desorden con que tratan el objeto de su “amor” con que es más que una experiencia libidinosa.

No obstante, también sufren miedos y decepciones después de realizar estas prácticas. Aparece la culpa y la justificación que, en el caso de las miradas, está “observando” la belleza de la mujer.

No toma en cuenta que al lado de él está su compañera y que está dañándola porque no está haciendo nada “malo”.

Esta sociedad machista justifica estas conductas. Para la compañera es una falta de respeto y enajenación que cuesta entender. En ocasiones es necesario buscar ayuda profesional. No tenga vergüenza, ni miedo, busque ayuda, en nuestro país se la pueden dar.

Es posible que parezca que la ausencia de satisfacción que lo une a su pareja es una excusa o por otras razones nunca es libre de “amar” como desea.

Esta situación se repite continuamente y quienes la viven sufren desesperadamente por el mismo motivo una y otra vez sin comprender que es la insatisfacción lo que inconscientemente buscan.

Por estas razones es importante buscar ayuda profesional. En Costa Rica existen psicólogos y sexólogos que se dedican al tratamiento de estas dificultades, así como grupos de autoayuda. Hay ocasiones en que se debe recurrir al tratamiento farmacológico ya que favorece la disminución del fetichismo o desaparición de esta conducta.

Foto: 1718913

Rogger BUSTAMANTE

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