Alexander Aguilar
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El derechazo de Víctor Cordero, al minuto 89, devolvió un suspiro de esperanza al Saprissa cuando la agonía se volvía tormento morado.

El Pachuca estaba a pocos segundos de sacar un triunfo con sabor a Mundial de Clubes, pero Saprissa se levantó fiel a su estilo, anotando en el cierre.

Con el 1-1 la moneda quedó en el aire y todo se resolverá el próximo miércoles en el estadio Hidalgo de México, aunque es evidente que la mayor complicación viajará en la maleta de los morados.

Los “Tuzos” mexicanos apagaron anoche muchas sonrisas en un estadio morado a reventar.

No más comenzando el segundo tiempo los aztecas se pusieron al frente con el gol de Luis Gabriel Rey a pase de Damián “La Chilindrina” Alvarez, en una acción que la defensa morada regaló la buena posición porque nunca existió fuera de juego.

Tanto los saprissistas como los “Tuzos” jugaron un partido de muchos cálculos, donde el accionar de mediocampo prevaleció para restar emociones en ambas áreas.

Contadas opciones claras de gol tuvieron ambos cuadros. Una para Saprissa en la inicial --palo de Borges-- y otra para Pachuca en remate de Caballero que resolvió acertado Keylor Navas.

Las cosas no cambiaron mucho en la segunda mitad.

El tico Armando Alonso no logró entrar de lleno en el partido, al ser el referente ofensivo de los morados, mientras que los “manitos”, con la ventaja numérica en el bolsillo, se dedicaron a cerrar espacios ante el acoso morado que fue notable, pero sin pegada ni peligro real.

Virtud para Pachuca su excelente aparato defensivo, que tuvo un solo despiste que aprovechó Cordero para anotar y darle vida a un Saprissa que está vivo.