Beatriz Puerta
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Lo quiero, pero no puedo seguir así

Estoy con un chico desde hace casi cinco años, pero siento que yo no lo conozco bien. Ni en mi familia ni en la de él están enterados de la relación que tenemos. Las veces que estuvimos juntos, siempre era para hacer el amor en un hotel. Yo como estúpida pagaba todo: la comida, el hotel, le ayudaba a salir de sus deudas y hasta le compraba juguetes a un hijo que tiene con otra mujer. Pero desde hace un tiempo no soporto esta situación. Le envié un mensaje al celular para decirle que lo mejor es que nos demos un tiempo. Admito que puede ser infantil no enfrentarlo, pero siempre es lo mismo, le planteo la verdad y seguimos juntos. Pienso que eso debilita mucho nuestra relación. Creo que tenemos que llegar a una decisión final. Estoy de un carácter que no me soporto. Ya no sé qué hacer, pero es pésimo sentirse como frustrada. No quiero volver a ceder cuando él me busque. Me siento muy mal. Percibo que no tengo una salida adecuada, porque la situación se repite.

Chica confundida

Si tienes tan claro que no te interesa esa relación y que no quieres volver a ceder, no existe razón para pensar que tienes un problema. Compórtate en serio y corta de una vez por todas con esa situación. Con el tiempo todo pasa y lo olvidarás, aunque ahora te cueste. No es fácil porque son cinco años de compartir, pero al parecer y por lo que cuentas, estás en una relación muy equivocada.

Analiza de verdad lo que pasaría, si sigues con él. No cedas aunque tengas dudas sobre lo que sientes. Si te atreves a hacerlo, verás que muy pronto te sentirás muy contenta.

Si te pones a pensar, encontrarás que una relación como esa, no conviene en lo más mínimo. Tienes que darte cuenta que existen muchas opciones para escoger a otra pareja. Te aseguro que siempre encontrarás a alguien para tí.

Mientras encuentras a tu persona ideal, debes de vivir con ganas y optimismo.

Busca la forma de disfrutar la vida, tienes que estar tranquila y no asumir responsabilidades que no te corresponden.

Puedes vivir sin preocupaciones, deja de mantener a quien no te merece, ni mucho menos valora lo que haces por él.