Sao Paulo / DPA.- El cuestionado técnico de la selección brasileña de fútbol, Carlos Dunga, logró finalmente un aliado: nadie menos que el "rey" Pelé, quien se convirtió en voz solitaria en defensa de la permanencia del entrenador en el cargo.

"Es necesario darle tiempo a Dunga. Cuando uno pierde o no está bien es fácil criticar. Pero este no es el momento. Hay que tener paciencia", expresó "O Rei", en declaraciones formuladas anoche en Sao Paulo, durante una visita a las obras del Museo del Fútbol, que será inaugurado probablemente este año en el estadio Pacaembú.

La permanencia de Dunga en el cargo que ocupa desde hace dos años quedó en entredicho después de la derrota por 2-0 ante Paraguay y del empate sin tantos con Argentina, que dejaron al equipo "pentacampeón" en un modesto quinto puesto en las eliminatorias del Mundial de Sudáfrica 2010.

En las últimas presentaciones de la selección, la hinchada abucheó intensamente al entrenador, en medio de gritos de "­Burro!" y de "­Adiós, Dunga!".

El técnico enfrenta además pesadas críticas de la prensa local, cuyos analistas son unánimes en pronosticar que perderá el cargo en caso de que no logre conquistar en los Juegos de Pekín la inédita medalla de oro olímpica, la única asignatura pendiente del victorioso fútbol brasileño.

Al contrario de Pelé, sin embargo, varios ex jugadores que integraron la selección brasileña en 1958 -cuando el país conquistó el primer de sus cinco títulos mundiales, en Suecia- criticaron duramente el desempeño de Dunga.

El ex delantero Pepe, por ejemplo, consideró como "precipitada" la decisión de la Confederación Brasileña de Fútbol (CBF) de nombrar como técnico a Dunga, quien no tenía experiencia alguna como entrenador cuando asumió el cargo, hace dos años.

Con Pepe coincidió el ex zaguero Orlando, quien afirmó que el equipo de Dunga "no se parece nada a una selección brasileña", y concluyó: "�l no tiene categoría para entrenar el equipo".

Sin embargo, el ex técnico de la selección brasileña, Mario Zagallo, recordó que Dunga "ya ganó una Copa América" (la de Venezuela, en 2007), y sostuvo que la culpa del mal desempeño de la "verdeamarela" no es sólo del entrenador.

"Este es un mal momento también para los jugadores. Estamos en una fase de transición, que se inició en el Mundial de 2006. Aquella base (de jugadores) ya no existe, hay que renovar", concluyó.