Rodolfo Martín
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Un sujeto de apellido Gardela fue detenido anteayer bajo la sospecha de ser uno de los dos que, el 17 de junio pasado, asesinaron al chancero Marvin Carrillo Badilla de un balazo en el pecho.

Ya herido, Carrillo prefirió revelar donde estaba su bolso con su dinero y morir, antes de que le mataran a su esposa y su hija, quienes se encontraban en el interior de la casa.

El detenido es un reconocido delincuente del distrito de Cariari. También aparece como sospechoso de este crimen otro sujeto apellidado Rojas, conocido como “Rascatuchi”, y que está actualmente en fuga, trascendió. Ambos tienen 20 años.

Carrillo, de 33 años y vecino de Los Ángeles de Cariari, acababa de llegar a su casa cuando, a las 7:15 p.m. alguien tocó a la puerta.

“Antes de que terminara de abrir, alguien, desde fuera, empujó la puerta con fuerza, lo que les permitió entrar”, recordó ayer una fuente cercana al caso.

Casi inmediatamente le dispararon al chancero en el tórax y luego le preguntaron dónde estaba el bolso.

Carrillo se los entregó y los delincuentes huyeron por una finca sembrada de palmitos, mientras él entraba en una dramática agonía. Los sujetos salieron a una calle principal, donde los vieron los testigos.