Amarrado de pies y manos con un mecate rojo a 20 metros del túnel

Lo ajustician y tiran en el Zurquí

Víctima era cocinero en un restaurante de San José, dijo hermano vía telefónica

Heredia - Amarrado de pies y manos y con visibles golpes en la cara, fue encontrado ayer el cuerpo del cocinero Enrique Bermúdez Peñaranda, de 43 años, quien fue asesinado, al parecer, por un ajuste de cuentas.

El crimen quedó al descubierto ayer a las 9:45 a.m., cuando el conductor de un Nissan Stanza que se detuvo en el lugar, observó que el cuerpo yacía a unos tres metros de la carretera, en el sentido San José-Guápiles.

Esa persona alertó a un cruzrojista que pasaba con varios pacientes rumbo al INS.

Tras informar, tanto el hombre, como otras tres personas que viajaban con él, siguieron con rumbo a Guápiles, trascendió.

Omar Espinoza Jiménez, socorrista de El Carmen de Siquirres, afirmó que al observar a la víctima bajó y le tomó el pulso, pero ya no presentaba signos vitales, sino una rigidez cadavérica. En el pantalón se encontró la licencia y la cédula de identidad, dijo el OIJ.

Agregó que era un hombre de unos 45 años, de cabello corto rapado, barba al ras y un hilo de sangre que salía de la cabeza, al perecer producto del golpe sufrido.

Segundo Bermúdez, hermano de la víctima, comentó vía telefónica que desconocía sobre la muerte de Enrique, aunque indicó que lo último que supo fue que trabajaba como cocinero en un restaurante de San José. Era padre de dos menores de 10 y 4 años y habitaba en Escazú.

Fue encontrado boca abajo y con muestras de aparente tortura, aunque sin impactos de bala visibles. Vestía una jacket de cuero negra, pantalón de mezclilla y medias tipo calceta blancas.

La víctima Enrique Bermúdez P. Edad: 43 años