DPA, EFE y AFP.- Partidarios de la precandidata presidencial demócrata, Hillary Clinton, mantuvieron conversaciones con el equipo de campaña de su rival, Barack Obama, para diseñar una renuncia digna de la exprimera dama a la carrera hacia la Casa Blanca, informó ayer CNN.

Esto a pesar de que los equipos de ambos contendientes desmintieron la versión. Cuando sólo faltan tres primarias, Obama está cerca de rebasar el número de delegados necesario para hacerse con la candidatura presidencial

Según el reporte de CNN, los contactos entre el entorno de los candidatos barajaron la posibilidad de que Clinton sea la compañera de fórmula de Obama como candidata a la vicepresidencia, volviendo así a la imagen de unidad que el partido necesita.

De hecho, el New York Times afirmó que Bill Clinton impulsa esa opción para posicionar a su esposa de cara a un hipotético nuevo intento de llegar a la Casa Blanca, en el 2016.

Cerca de Latinoamérica

Mientras esto ocurría, en Miami, Obama dijo que si llega a la Casa Blanca impulsará una nueva alianza con América Latina, en la que apoyará a Colombia en su lucha contra la guerrilla de las FARC y también dará prioridad a la seguridad regional.

En un discurso ante líderes de la comunidad cubana y dirigentes latinos, el precandidato explicó que Estados Unidos debe reconocer que su seguridad y prosperidad, están ligadas al futuro de las Américas.

“Es momento para una nueva alianza luego de 8 años de políticas fallidas del actual gobierno de George W. Bush”, advirtió Obama. “Mi política hacia las Américas será guiada por un simple principio: lo que es bueno para los pueblos de las Américas es bueno para EE. UU.”, añadió.

Las FARC y Cuba

Sobre las FARC, Obama agregó que de llegar a convertirse en Presidente de su país, le pedirá a Venezuela cuentas por su relación con el grupo guerrillero.

A su vez, comentó que permitiría los viajes familiares a Cuba y el envío de remesas, pero mantendrá el embargo a la isla caribeña.

“Voy a permitir los viajes y el envío de remesas, para que puedan ayudar a padres, hermanos y tíos; para que el dinero estadounidense haga que el pueblo cubano sea menos dependiente del régimen”, añadió.