Ileana Vargas

Aunque Mauricio Mayorga no tiene cédula de identidad, sobre sus hombros cuelga la responsabilidad de representar a nuestro país como Míster Costa Rica Manhunt 2008 a nivel mundial.

En este nuevo camino de retos al que se enfrenta el guanacasteco, ya salió victorioso de uno bastante significativo: derribar los prejuicios sociales dentro de su propio hogar.

Cuando el colegial vio una información publicada en Al Día donde la organización Reinas de Costa Rica anunciaba la inscripción para el certamen de belleza masculina, no lo dudo dos veces y decidió probar suerte.

Sin embargo, Mayorga sintió que su sueño se alejaba cuando sus padres y en especial su madre, no le dieron la aprobación para participar en un concurso de esa línea.

“A la primera persona que le dije que quería inscribirme en el certamen fue a mi mamá, pero reaccionó de una forma extraña. Además, me dijo que debía esperar tener más edad para madurar”, relató el muchacho.

Incluso el joven cuenta que gracias a una conversación entre su madre, Lilliam Vargas y su tía Flory, fue que la progenitora accedió a que participara.

“Hablé con mi tía porque estaba muy preocupado de ver a mi mamá tan incómoda con el tema del concurso. Afortunadamente ella logró convencerla”, dijo Mayorga, con un suspiro de alivio.

Las dudas y la incertidumbre de su madre terminaron en saltos y alegría cuando hace doce días su hijo obtuvo el primer lugar de Míster Costa Rica 2008.

“En la noche, con más calma, ella (su madre) me pidió disculpas por lo que había pasado al inicio” reveló.

El espigado muchacho también contó que cuando realizó la primera prueba en el certamen se enteró que era el único guanacasteco y pensó que podía existir un poco de discriminación.

Sin embargo, conforme pasaban los ensayos tomó más confianza y olvidó esa preocupación.

“Creo que el jurado vio en mi que soy capaz, luchador y esforzado”, citó .

Además, manifestó que tuvo que aprender a ser indiferente con los comentarios negativos que hacían algunos compañeros del colegio cuando se enteraron que estaba dentro del concurso.

“Nunca hice caso a los comentarios que trataban de quitarme el impulso de intentarlo, así que solo aproveché la oportunidad de hacer lo que quería”, indicó con orgullo.

A prueba

El éxito internacional alcanzado por anteriores Míster Costa Rica como Daniel Garro, Alonso Fernández y César Vargas, hace que el actual vencedor sienta una responsabilidad por hacer un buen papel.

“Conozco el excelente trabajo que han hecho los Míster Costa Rica y eso me compromete a dar el mayor esfuerzo para conseguir, al igual que ellos, los primeros lugares en los concursos a los que tenga la oportunidad de asistir”, expresó.

La primera vez que el joven salga del país a representar a Costa Rica será en abril del próximo año rumbo a Corea, donde se realizará el Míster Manhunt Internacional 2009.

A diferencia de los que han ocupado ese puesto, este joven de 17 años nunca había posado ante las cámaras fotográficas o desfilado en una pasarela.

Su humildad le permite aceptar sin ninguna pena ni temor la necesidad de pulir ciertas áreas personales.

“Estoy dispuesto a seguir todos los consejos que me den en la organización para ganar contextura y así acercarme al perfil que buscan en las competencias internacionales”, sentenció con convicción.

Su vida

Tiene dos hermanos, Maikol de 20 años y Sabrina de 5 años.

El joven terminó con su novia en enero.

De niño le encantaba jugar Legos, carros y meterse en los charcos cuando llovía.

Su mujer ideal debe ser inteligente, cariñosa, sencilla y comprensiva.

Dentro de sus pasatiempos está la lectura de libros reflexivos y salir con sus amigos.

Colegial

Aunque para muchos es extraño, el actual Míster Costa Rica 2008 es un adolescente de 17 años que cursa el quinto año de colegio.

Cuando obtenga el bachillerato el joven dejará Guayabal de Bagaces para irse a vivir a San Antonio de Belén.

Para participar en Míster Costa Rica tuvo que estudiar mucho para eximirse en todas las materias.