Isaac Zúñiga
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El exministro de Cultura, Guido Sáenz, quien interpuso días atrás un recurso de amparo ante la Sala IV, para evitar que se construya en La Sabana el nuevo estadio Nacional, habló con Al Día de su polémica postura al respecto.

¿Por qué hasta ahora, ya con el antiguo estadio demolido, presentaron el recurso?

Si uno sopla no es tan fácil hacer botellas, todo tiene su tiempo. Presentar un recurso o una disposición de orden legal así, no es sencillo. Yo le hablé al Presidente Óscar Arias, hace meses por teléfono, pero él en su tesis y yo en la mía. Él me dijo que si no se hacía ahí (en La Sabana), no se hacía. Estudiamos y vimos por donde entrarle al asunto para detener las obras, siempre apegados a la ley.

¿Cuánto tiempo se tomó o hace cuánto realizó los estudios y demás, para tomar la decisión de presentar el recurso?

Hará un mes o tres semanas, para parar la construcción. Hay una ley (hecha por Rolando Laclé y Óscar Soley, en 1993, donde se prohíbe construir en La Sabana) y yo estoy apegado a ella, que dice que no se puede cerrar ningún área, de que los ciudadanos transiten libremente. Si hacemos el estadio, la gente tendrá que pagar para acceder a esa parte de La Sabana, y la ley lo impide.

Está de acuerdo con la demolición del viejo estadio, entonces, ¿por qué se opone a la construcción del nuevo?

Sí, era un estadio que estaba en mal estado, un tugurio. No se puede construir en La Sabana, en esa área, porque la ley así lo prohíbe, pero yo no me opongo a que el estadio se haga en otros terrenos.

¿Qué le dicen las encuestas, donde claramente el grueso de la población quiere que el estadio se construya en La Sabana?

La gente no ha entendido, no piensa, la conveniencia o la inconveniencia, esa tierra es inamovible. Yo les ayudo, hay muchos terrenos donde construirlo.

¿Considera que se echó al pueblo encima?

No es la primera, qué le vamos a hacer, afortunadamente el destino me ha favorecido: lo de la Aduana, lo de la Sinfónica, son ejemplos. El tiempo me dará la razón, pero ya no voy a estar vivo, tengo 80 años.

¿No cree que le corta las alas a un posible desarrollo del deporte nacional?

En lo absoluto, al contrario, le estoy abriendo más opciones. Vámonos a otra parte, donde se pueda generar una especie de Villa Olímpica, donde podamos practicar varios deportes, algo con visión.