Iván Mraz

La decisión de FIFA que permite la numeración de los jugadores en la cancha solo del 1 al 18 es muy inteligente y parece ser el primer paso de esta institución hacia “economización” en este deporte.

A algunos podría parecerles un paso atrás, pero personalmente pienso que después de tantos años de búsqueda de patrocinadores y nuevos ingresos, finalmente se está entendiendo que la FIFA se está enriqueciendo por dentro, pero por fuera está lentamente perdiendo la competitividad de los equipos y el interés de la afición, que lógicamente se reflejerá en los ingresos.

Basta ver los partidos finales entre clubes, pero también con selecciones, siempre con la participación de casi los mismos equipos.

A la FIFA no le hace falta la plata, pero qué relación hay con volver a la numeración antigua. Poco a poco obligará a quitar de las espaldas también el nombre del jugador. Y como consecuencia sucederá, por ejemplo, que la camiseta número 3 la podrían utilizar tres o cuatro jugadores en toda la eliminatoria mundialista, en la Liga de Campeones o simplemente en el campeonato nacional. Se elimina el montón de uniformes que se necesitaban hasta ahora cuando cada jugador tenía su número propio, muchas veces con su nombre.

Supongo que se trata de un pasito pequeño, pero significa que la máxima institución de fútbol mundial ya comienza a ver como economizar en este deporte. Entiende que en el fútbol no juegan solo clubes y selecciones ricas e intenta abrir el campo para una más amplia competitividad que es el principal atractivo de este bello deporte. Ojalá vengan pasos más grandes.