Miguel Calderón
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Practicó fútbol y béisbol, sin embargo, fue en las olas que el muchacho encontró su destino...su pasión.

El deporte del surf lo atrapó. Se apoderó de él desde el primer día que este se atrevió a montar una tabla mar adentro.

Hoy, a sus 16 años, el surfista Carlos Muñoz espera realizar un excelente papel en el Billabong World Surfing Games 2009; torneo que se realiza en playa Hermosa, en Jacó.

“Este campeonato es mi cuarto torneo mundial y representa muchas cosas para mí: esfuerzo, dedicación y sobretodo una gran oportunidad para darme a conocer”, afirmó el adolescente nacido en enero de 1993.

Gracias a su talento en el deporte de las olas, Muñoz ha conocido países como: Panamá, Nicaragua, Estados Unidos, Ecuador, Chile, Francia e Indonesia. ¡Casi nada!

“En Indonesia están las mejores olas porque hay mucho arrecife de coral y las olas son muy variadas”, aseguró.

De su niñez, Carlos recuerda gratos momentos junto a su madre y su padrastro en su tierra: Esterillos Oeste en Parrita, lugar en el cual aprendió a surfear.

“Mi mamá me decía que no me metiera al mar porque me comían los tiburones”, recordó entre risas. “Le daba mucho miedo”, agregó.

Dice que nunca le ha tenido miedo a las olas, pero sí mucho respeto.

Asegura que la suerte lo ayudó algunas veces para salir con vida del agua.

“Cuando tenía 11 años una ola me revolcó en Jacó y me sumergió al fondo del mar. Pensé que me iba a morir”, expresó el novato.

Dentro de sus logros el joven tiene en sus filas los siguientes títulos: Mini-grommets (categoría para niños de 12 años) en el 2005, Grommets (14 años) en el 2006, Boys (16 años) en el 2007 y 2009, Junior (18 años) en el 2008 y 2009.

Su más reciente campeonato fue el Open, este año.

Además, en abril anterior obtuvo el noveno lugar en el Mundial Junior, en Ecuador, convirtiéndose así en el mejor hispano en toda la historia.

Más a fondo

Muñoz estudia en el colegio María Inmaculada de Jacó. Cursa el noveno año. Actualmente vive en Esterillos Oeste en Parrita junto a su madre. Antes de cumplir los 10 años vivió en Aserrí de Desamparados.