Rodolfo Martín
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Santa Cruz. Las familias, los amigos y los vecinos de los cinco fallecidos lejos de necesitar una explicación acerca de lo sucedido, lo que requieren es una oración de apoyo y consuelo, expresó el sacerdote Elkin López Alfaro, cura párroco del santuario del Santo Cristo de Esquipulas.

“Aquí no hay motivo para mayores especulaciones o preguntas. Estamos enfrentando un accidente que trajo dolor y duelo a cinco familias”, expresó el sacerdote quien tiene poco más de tres años de estar a cargo del santuario.

“Lo que esperan las familias es una oración, un bálsamo para sus seres queridos, muy conocidos por todos, y razón por la cual ese consuelo debe ser extendido hacia otras personas”, manifestó el sacerdote.

“Existen familias que se preparan para enfrentar este tipo de dolor. Cito por ejemplo, a aquellas a quienes el médico les informa que el pariente padece de una enfermedad terminal. Si ellas, que están aleccionadas, sufren un gran dolor, ¿qué pueden estar experimentando ahora estas familias que no estaban preparadas porque todo obedeció a un accidente?”, añadió.

“Estamos impactados. Todo el pueblo lo está. Hubo un accidente en el cual murieron cinco muchachos. Este es un golpe muy duro porque todos ellos eran miembros de familias muy conocidas y apreciadas”, puntualizó el sacerdote, minutos después de concluir la ceremonia religiosa en el parque Bernabela Ramos.

Al fondo, un miembro del coro que había amenizado la misa comenzaba a cantar: “Tú eres mi hermano del alma realmente el amigo”, al tiempo que la banda municipal acompañaba el cortejo hacia el cementerio situado a casi un kilómetro de distancia.