Buenos Aries, Argentina / EFE. - Desde una fuerte alza en el uso de servicios por Internet hasta un aumento en la demanda de niñeras, engloban algunos de los cambios de hábitos que produjo en Argentina el avance de la gripe A, que cobró, hasta ayer, la vida de 94 personas, según cifras oficiales.

El ministro de Salud, Juan Manzur, recibió el viernes un cargamento proveniente de Suiza con 100.000 nuevas dosis de medicamentos contra la nueva gripe, provocada por el virus AH1N1.

En medio de este panorama, los servicios de compras por Internet que ofrecen los supermercados colapsaron en varias ocasiones la semana anterior, en sintonía con las recomendaciones de que la población se recluya en sus casas para limitar las posibilidades de contagiarse con la influenza humana, que se estima estaría afectando a 100.000 personas.

“Se ha alcanzado la cantidad máxima permitida de usuarios conectados simultáneamente. Por favor, intente más tarde. Disculpe las molestias ocasionadas”, apareció varias veces, durante la semana, en el portal web de Coto, una de las principales cadenas de hipermercados.

Otras empresas vieron la oportunidad y no demoraron en lanzar nuevos servicios, como el caso del supermercado por Internet Leshop, que incorporó “Chicos en casa”, que ofrece productos destinados a los niños que permanecen en sus hogares sin ir a la escuela debido a la suspensión de clases en 17 distritos del país.

El servicio incluye “yogures, galletitas y elementos de botiquín especialmente pensados para la prevención de la gripe A”, explicaron en la compañía, una de las beneficiadas por la pandemia, al igual que el servicio “on-line” de los bancos, cuyos ingresos aumentaron sustancialmente, según coinciden las entidades financieras.

Los nuevos hábitos se afianzaron desde el jueves a raíz del día festivo por la conmemoración de la independencia argentina y del “asueto sanitario” implementado el viernes por el Gobierno para evitar la propagación del virus.

Se prevé que para mañana el comercio se normalice.

Negocio para las niñeras

Otras de las grandes beneficiadas por la suspensión de las clases y la falta de actividades fuera del hogar son las niñeras y maestras a domicilio, que deben echar mano a su destreza para entretener y enseñar a los más pequeños.

“Un día normal teníamos diez pedidos de niñeras, ahora recibimos veinte”, afirmó a medios locales Claudia Ortiz de La Cigüeña, una consultora bonaerense.

Además, la expansión de la gripe A obligó a pensar a los argentinos en la inesperada posibilidad de dejar de compartir la bombilla del mate, presente en el 98 por cientos de los hogares del país.

El Instituto Nacional de la Yerba Mate. que agrupa a los productores, recomendó que cada uno modifique la tradicional costumbre para no contagiarse.

“Es bueno tomarlo porque es una fuente de hidratación, pero siendo responsable con la limpieza de los elementos”, explicó Graciela Jorda, bioquímica de la Universidad Nacional de Misiones.

Se eleva a 94 la cifra de muertos

Argentina / AFP.- La cifra de muertos por influenza humana se elevó a 94, informó ayer el Ministerio de Salud en un comunicado de prensa.

“Los análisis confirmaron 2.928 casos, 2.351 fueron descartados, con 94 fallecidos”, indicó el parte oficial.

Según el reporte, diez personas murieron en la capital, 50 en la provincia de Buenos Aires y una en el área metropolitana. 26 corresponden a la provincia de Santa Fe y el resto de las víctimas fatales se reparten en otros seis distritos.

El ministro de Salud, Juan Manzur, declaró la semana pasada que se infiere por proyecciones que unas 100.000 personas se contagiaron con el virus desde que se declaró la pandemia en el país, en mayo.

La propagación del mal ubica a Argentina en el tercer lugar en fallecimientos, detrás de EE. UU. (170) y México (121).