Rodolfo Martín
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Quien fuera el guardaespaldas de una mujer asesina a balazos el 17 de abril pasado, mató ayer por la tarde a dos hombres frente al abastecedor “San Juan I”, en barrio La Floresta, en Ipís de Goicoechea.
Anoche, al cierre de edición, no habían sido identificados.
Uno recibió dos impactos en la cabeza y expiró en la entrada de la pulpería, según el paramédico Fabio Castro.
El otro apareció abandonado a un lado de la calle, frente a la ciudadela Rodrigo Facio, a unos dos kilómetros de distancia del negocio donde se produjo la balacera. Tenía un balazo en el abdomen y otro en las costillas, explicó el paramédico.
Las víctimas y al menos otro sujeto no identificado llegaron al abastecedor en dos carros distintos, según testigos.
Uno se estacionó a 30 metros de distancia y el otro, frente a la fachada. Ambos fueron alcanzados por el administrador del abastecedor en un presunto acto de defensa, comentó el comisionado de la Fuerza Pública, Juan Carlos Arias.
Al verse contraatacados, los sujetos dejaron al caído en el abastecedor y huyeron. Cuando viajaban por La Facio, abandonaron a al otro baleado.
“Guardaba tierra en la boca. Además, tenía el zapato izquierdo destrozado, lo mismo que la media y el pie, a tal punto que el hueso quedó expuesto. Es posible que al escapar hubiera quedado guindado de la puerta del auto y fue arrastrado unos 30 metros antes de caer”, comentó Castro.
En la escena hallaron tres armas. Al lado del cuerpo una nueve milímetros y una 45. La tercera, también nueve milímetros, apareció sobre una canasta plástica, dentro del negocio.
Además, se incautó otra nueve milímetros al administrador.
Inicialmente, hay dos hipótesis sobre lo ocurrido: un fallido asalto, según Arias, o bien un malogrado ajusticiamiento, de acuerdo con versiones de un allegado del dueño del local.
Al parecer, los sospechosos llegaron con el propósito de matar al pulpero porque este había sido guardaespaldas de Angelie Amador Blanco, asesinada a tiros el 17 de abril pasado frente a su casa en barrio El Edén, en Vista de Mar de Goicoechea.
Su marido, Randall Alvarado, sobrevivió después a dos atentados: el 23 de abril en Desamparados, donde salió herido junto con su amigo César Vargas, y, el segundo, el 18 de junio, frente a su casa en El Edén. En esta ocasión dos victimarios, de apellidos Quesada y Constanza, resultaron heridos. El segundo murió días después en el Calderón Guardia.
El comisionado Rojas no quiso desmentir o confirmar estas posibilidades.
Mismo caso
Juan C. Arias Policía.
Los dos fallecidos, el de La Mora y el de La Facio, están relacionados. Corresponde al OIJ esclarecer los pormenores”.
Fabio Castro, Cruzrojista.
Las lesiones en ambos casos fueron en extremo graves, mortales. Al llegar nada se podía hacer por ellos”.
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