Belgrado / AFP. La selección brasileña de voleibol masculino se clasificó para la final de la Liga Mundial, tras ganar por 3 sets a 0 a Rusia, ayer en Belgrado, con lo que confirma su condición de favorita para recuperar la corona en el prestigioso torneo.

Su adversario de hoy será Serbia, que derrotó 3-1 a Cuba.

Es la octava vez en nueve años que los brasileños alcanzan la final de la Liga Mundial. Se han impuesto en la competición seis veces, pero fracasaron el año pasado, al caer en semifinales, precisamente en la edición que se disputaba en Rio de Janeiro.

Los jugadores auriverdes fueron muy fuertes ayer en la defensa y en la recepción, como se esperaba, pero también en el servicio (8 saques directos contra 1) y en el ataque. Como resultado, un rápido triunfo, en apenas una hora y 12 minutos.

Este triunfo es ya un gran éxito para el entrenador Bernardinho, que tiene como gran reto la reconstrucción de la selección verdeamarela, después de las decepciones de 2008, donde además del revés de la Liga Mundial, perdieron la corona olímpica en los Juegos de Pekín, ante USA.

“Tenemos una gran presión desde hace un año, porque la gente quiere resultados. Hemos demostrado que somos competitivos. Ahora nos hace falta regularidad”, comentó el técnico, campeón olímpico (2004) y dos veces del mundo (2002, 2006).

Giba fue el máximo anotador de la semifinal con dieciséis puntos. Otras figuras son Murilo, Sergio y Vissotto (2,12 metros).