Christian Campos, corresponsal y Hugo Solano
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Playas del Coco. - “Estaba acostado y medio dormido. Recuerdo que estaba boca abajo, cuando, de repente, sentí un golpe en seco en la puerta del cuarto y, como una reacción, me encogí. Sentí el escopetazo y vi una sombra irse”.

Así recuerda Luis Adrián Oduber, de 46 años, hijo del expresidente Daniel Oduber, el ataque de que fue objeto en su residencia en Liberia, entre la noche del 10 y la madrugada del 11 de noviembre pasados.

No sabe quién quiso matarlo y solo recuerda que esa noche era normal.

Al llegar a acostarse se despidió, como de costumbre, de Johnny Villalobos y Eduardo Valverde, sus amigos más cercanos.

Luego, se produjo el ataque del que se salvó aunque ameritó hospitalización.

Hoy agradece a Dios esta segunda oportunidad en su vida, y dice que no le alcanzarán los días para agradecer al personal médico del hospital de Liberia por como lo atendieron.

“Dios y ellos me salvaron”, dijo Oduber.

¿Qué buscaban?

En entrevista con Al Día, en playas del Coco, Oduber se quejó de la acción del Organismo de Investigación Judicial.

“No entiendo el tratamiento que la Policía Judicial le hizo a mi caso. ¿Qué es la cosa? ¿Andaban buscando drogas? ¿Por qué tantos perros de la Policía buscando varios días en mi casa? Y hasta la cerraron.

“Cuando recobré el sentido y me contaron, sentí que se quiso hacer el mismo montaje que una vez le hicieron a papá”, afirmó.

Mergin Mora, jefe del Organismo de Investigación Judicial de Liberia, aseguró: “Hicimos el tratamiento que se le da a una escena de homicidio o de tentativa de homicidio”.

“Sabíamos que la prensa iba a estar muy pendiente y nuestro interés fue el de encontrar el arma con que cometieron el atentado; y hasta la fecha no se ha encontrado”, agregó Mora, quien tomó en cuenta que Oduber es hijo de un expresidente de la República.

Para Mora, las tres armas que supuestamente él tenía, no se encontraron.

“Por eso fue que hicimos un trabajo muy minucioso”, indicó el oficial.