Isaac Zúñiga Keith
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¿Qué será lo que tienen los vampiros que a la gente le fascina tanto?, y por ende a través del tiempo ese personaje se mantiene con tanta vigencia en películas o series de televisión.

Esta criatura siniestra que se alimenta de sangre de seres vivos para mantenerse activo, ha sido utilizada profusamente en el cine de terror.

En la gran pantalla hizo su aparición en 1896, cuando el famoso director George Méliès, efectuó una historia de vampiros llamada “La Manoir du Diable” (“La Mansión del Diablo”).

Sin embargo, fue con la primera versión de Drácula, novela de Bram Stoker, que los rasgos genuinos y sobrenaturales del vampiro se dejaron ver y cautivaron, hasta la fecha.

“Es de las figuras clásicas del terror, llamativa, atractiva y repulsiva. Incluso posee atracción sexual, no es el típico monstruo todo feo. Se ve como cualquier ser humano, es elegante y refinado de modales. Es un personaje como inmortal que ha logrado vencer la muerte y esos elementos lo han hecho exitoso”, explicó el crítico de cine Mario Giacomelli.

En la televisión el actor Béla Lugosi fue el primero en interpretar a un vampiro en 1954, con su aparición en el programa “You Asked For It”, donde personificó una escena de Drácula.

“Hay mucho misterio alrededor de él. El mordisco de un vampiro implica pese a la sangre y colmillos, un romanticismo, va mucho con lo sexual. Es un tipo elegante, usa vestido entero negro con dos colas atrás, una capa; encanta a través de ser un tipo elegante y seductor”, coincide el historiador José María Junco.

En la actualidad se han ido modificando y modernizando los vampiros, aún así el éxito se mantiene, sino, que lo digan series como “True Blood” o “Crepúsculo,” que capturan la atención de miles de fanáticos en toda Latinoamérica.

710 películas, relacionadas con temas de vampiros se han hecho en la historia.