Revista Semana y AFP*
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Un hijo del abatido narcotraficante colombiano Pablo Escobar pidió perdón a los familiares de los políticos Luis Carlos Galán y Rodrigo Lara, asesinados hace dos décadas por orden del capo y estos aceptaron la reconciliación, según un reportaje publicado por la revista “Semana”.

El semanario bogotano señaló que el arquitecto Sebastián Marroquín –el nuevo nombre de Juan Pablo Escobar, el hijo del extinto jefe del cartel de Medellín– remitió en el 2007, desde su residencia en Argentina, una carta de tono conciliador a los familiares de Galán y Lara.

Marroquín pidió perdón a Claudio, Carlos Fernando y Juan Manuel Galán, hijos del excandidato presidencial Luis Carlos Galán, y a Rodrigo Lara, hijo de un exministro de Justicia homónimo, y les propuso reunirse con él para sellar la reconciliación y hablar sobre el documental “Los pecados de mi padre”, que alude a la vida de Pablo Escobar y será presentado el próximo mes.

El documental, del cual fue anticipada una parte la semana pasada por CNN, muestra a Marroquín y a Lara, actualmente senador en Colombia, reunidos en un parque en Buenos Aires dialogando sobre la paz y el “duro pasado” de la guerra contra el narcotráfico en Colombia, el primer productor mundial de cocaína y un importante proveedor de heroína a EE. UU. y Europa.

La reunión entre Marroquín y los hijos de Galán se produjo en la capital colombiana.

Según “Semana”, el cineasta argentino Nicolás Entel tuvo la idea de que Marroquín escribiera a los hijos de Galán y Lara proponiéndoles reunirse con ellos para hablar de la reconciliación y la posibilidad de reflejar sus “vidas paralelas” en el documental “Los pecados de mi padre”.

“Respetados Claudio, Juan Manuel, Carlos y Rodrigo: (...) Nunca tuve tanto miedo como hoy para escribir una carta (...) ¿Cómo le escribes a una familia a la que tu padre le causó tanto daño? ¿Cómo puedes aún pedir perdón sin ofender?”, señaló el hijo de Escobar en la misiva del 2007.

“¿Cómo es posible aparecer y mirar a los ojos de los hijos de unos líderes que prometían sacar adelante a tu propio país?”, escribió Marroquín.

Tras leer la carta y reunirse después con el hijo del abatido jefe del narcotráfico, los descendientes de Galán y Lara le expresaron gestos de paz y reconciliación, según la publicación de “Semana”.

“Finalmente todos somos huérfanos”, dijo Marroquín, a lo que Lara le responde: “El pasado es duro. Pero lo importante es que usted es un hombre bueno, un hombre de paz. Yo soy un hombre bueno, un hombre de paz. Eso es, pa’lante hermano”.

En ese momento se dibuja una sonrisa en el rostro de Marroquín y se dan un cálido abrazo.

El exministro Rodrigo Lara fue asesinado en una calle de Bogotá en abril de 1984, en un hecho que las autoridades atribuyeron a pistoleros al servicio de Pablo Escobar y desató la “guerra” del Estado contra los narcotraficantes.

Galán, quien encabezaba las encuestas para las elecciones presidenciales de 1990 y lideraba el Nuevo Liberalismo, movimiento político al que también pertenecía Lara, fue asesinado en agosto de 1989 en un acto proselitista en la localidad de Soacha.

Las autoridades creen que Galán fue víctima de una conspiración en la que participó el exjefe del cártel de Medellín, abatido por la Policía en diciembre de 1993.

*Publicado con autorización de la Revista “Semana” de Colombia.