Rafael Pacheco
rpacheco@aldia.co.cr

         

Quizás usted ha pasado muchas veces o sólo ha oído hablar del lugar. A lo mejor ha pasado por ahí y no se ha percatado sobre su origen.

Le hablo de Cambronero, que hasta hace unos meses era la obligada y tradicional ruta para quienes viajaban hacia Puntarenas y Guanacaste.

Todo empezó a principios del siglo anterior en una sencilla casa de madera, en Santiago de San Ramón de Alajuela.

Allí vivieron Adelino “Nino” Cambronero, su esposa Aurelia “Nino” Gamboa y sus siete hijos.

Ella era maestra y él cortaba pelo, era herrero y administraba el comisariato.

Por aquel tiempo era difícil transitar y la vía la utilizaban principalmente los comerciantes que trasladaban café del Valle Central.

Fue así como la Casa Cambronero se convirtió en un punto de sesteo, donde los viajeros descansaban. Y a través de los años se mantiene como un importante referente del camino.