Rodolfo Rodríguez, colaborador
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Su objetivo está más claro que nunca: Un nombramiento como Gran Maestro del ajedrez, es lo que anhela Bernal González y por lo que luchará en la próxima Olimpiada, a partir del 20 de setiembre al 3 de octubre, en Khanty-Mansiysk, Rusia.
Su preparación lo ha llevado a conseguir un nivel óptimo para alcanzar el reto; cuatro horas diarias de estudio en cuanto a aperturas, tácticas y estrategias; sumado a la coronación de su undécimo título nacional la semana anterior, motiva al deportista a optar por su sueño.
“Para mí el Gran Maestro es el logro final de una carrera bastante buena, aunque todavía tenemos para unos años más”, indicó el ajedrecista, quien busca ser el segundo en el país en contar con esta prestigiosa clasificación, luego de Alejandro Ramírez, actual campeón del Abierto de Ajedrez de Estados Unidos.
Además de González, la representación patria se completa con la participación de Leonardo Valdés y Mauricio Arias entre los más experimentados; así mismo con los jóvenes Sergio Durán y Sebastián Ruiz.
González cuenta con la marca nacional de once campeonatos por encima del recordado Ricardo Charpentier, con ocho títulos en la década de los 50. Sin lugar a duda, Bernal es nuestra carta más prometedora.
Lo dijo
“El campeonato nacional que gané fue de los más difíciles. El nivel estuvo muy equilibrado”.
Bernal González, selección de ajedrez
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