Rodolfo Martín
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Un hombre de apellido Guido escapó de ser capturado por los agentes de la sección de Homicidios del OIJ al huir, a través de un túnel construido en la parte trasera de su casa, situada en Bajo Los Anonos, Escazú.

El sujeto, conocido como “Flaco”, es requerido como parte de las investigaciones que desarrolla la Policía para esclarecer el triple homicidio del 25 de mayo en el precario “El Triángulo de la Solidaridad”, en Calle Blancos, sobre la margen de la ruta 32.

Esa vez murieron Erlin Rostrán Duarte, de 18 años, Jaison Rivas Villagra de 16 y Gerardo Barberena Gutiérrez de 52 años a quienes acribillaron con ráfagas de AK-47 dentro de una pulpería.

Ese ataque, al parecer, fue ordenado por Guido quien, para ese efecto, contrató los servicios de tres sujetos de apellidos Campos, Rodríguez y Corella, conocidos como “Enano”, “Cachetes” y “Paul”, según las pesquisas de los oficiales de Homicidios del Organismo de Investigación Judicial.

Los dos primeros fueron detenidos después por otras causas.

El viernes, los agentes judiciales fueron por Guido y Corella, pero sólo éste fue capturado porque el primero escapó por el túnel.

“Flaco”, presuntamente, se hizo poderoso en Bajo Los Anonos vendiendo droga. Luego, se expandió y entró a otros puntos de venta, abrió uno en el Triángulo de La Solidaridad, trascendió.

Sin embargo, tiempo después cayó preso y al recobrar la libertad, quiso reabrir este puesto, pero ya estaba en manos de otros.

Al “Flaco”, se le achaca haber ordenado o ejecutado varias acciones en contra de esta gente que, a su vez, también lo buscaron en su territorio.

Rostrán, Rivas y Barberena murieron sin tener nada que ver en el pleito entre pandillas.

Igual ocurrió el 13 de marzo cuando, ahí mismo, en el Triángulo de la Solidaridad, pereció Francisco Petronilo González Argüello, un vecino que llegó en un taxi y a quienes “Paul” y sus cómplices confundieron con la gente de Los Anonos.