Isaac Lobo
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La gente no lo cree, porque él anda de fiesta en fiesta y tocando su rock criollo con el grupo El Guato, pero es la verdad. Geovanny Durán lleva más de cuatro años sin probar una sola gota de alcohol. Cuenta su historia, asegura que se siente muy bien y que recobró la confianza que tenía su familia en él.

¿Desde hace cuánto dejó de tomar?

Hace cuatro años, un 10 de octubre. Recuerdo que yo nunca visitaba bares solo, pero un 9 de octubre estaba solo en una barra. Era un lunes, a las 3 p.m. y era el cuarto día de tomar seguido y dije: ¡hasta aquí!

¿Por qué dejó de tomar?

Porque ya había pasado la etapa de la parte divertida, estaba en la del guaro feo. Ya no me sabía medir, perdí la vergüenza de quedarme de “palmada” hasta el otro día y ver a la gente bañadita y con el bulto del almuerzo dirigiéndose a su trabajo y uno dele que dele.

¿Le fue difícil?

No. Yo intenté varias veces y esta vez fue definitiva.

¿Qué ha ganado con esto?

Tener tranquilidad y nada de “goma”. Me concentro en proyectos y he podido viajar a México con el grupo. Antes tenía que pagar el cable y me tomaba la plata.

¿Se hizo aburrido?

Para nada, sigo en el “chingue” y el vacilón, voy a bares y a fiestas, sólo que no tomo.

¿Cómo se mantiene fuerte?

Me hice una promesa a mi mismo, ni para probar una gota. Casi demando a una gente que me vendió un tres leches con guaro.

¿Cómo hizo ahora que fue a Palmares?

Todo “relax”, más bien siento que la gente me ve “cool” por no tomar.