Diana Vega, colaboradora y DPA
redaccion@aldia.co.cr

         

Todo es según el color del cristal con que se mira. El goleador uruguayo Luis Suárez, por obra y gracia de su decisiva “atajada” en el instante final de la prórroga con Ghana, se convirtió en héroe a un lado del Océano Atlántico, en su país natal.

Óscar Tabarez, comentó que los dirigentes del fútbol de su país le mandaron a decir que la mano de Luis Suárez fue “la mano de Dios y de la Virgen María”.

Suárez continua siendo la figura y el artillero de la “celeste” en Sudáfrica 2010, sólo que ahora con más apoyo que nunca.

Fue clave para su equipo cuando por motivos ajenos a su habitual función: parado sobre la línea de meta, rechazó con su mano un cabezazo de Dominic Adiyiah que hubiera convertido a Ghana en la primera selección africana en meterse en semifinales.

“Tenía el cuerpo adentro, por eso no pude sacar la cabeza y no tuve otra que meter la mano. Vale la pena ser expulsado de esta manera. Sufrimos hasta lo último, pero la mano de Dios la tengo yo ahora”, dijo el viernes Suárez.

El apoyo lo recibe de sus compañeros, para ellos es un Dios que les regaló el pase a semifinales: fue uno de los héroes de la inolvidable noche.

“Suárez salvó el partido con esa mano”, afirmó Diego Forlán. Mientras el entrenador Oscar Tabárez opto por justificar a su dirigido: “Es una incidencia del juego. Es un instinto del jugador no dejar entrar la pelota”, agregó.

Los comentarios en internet no se hicieron esperar.

“Luisito es el ángel que nos devolvió el alma al cuerpo. Es el héroe de todos nosotros. ¡Que honor ser Uruguaya”, comentó una aficionada en el sitio Yahoo.