Rodolfo Martín
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Un empleado del Ministerio de Salud apareció calcinado ayer en la madrugada producto de un incendio provocado por un desperfecto eléctrico que tuvo su origen –precisamente– encima de una ropa que la víctima mantenía apilada a un metro de distancia, informó Henry Morales del Instituto Nacional de Seguros (INS).

Edgar Antonio Espinoza Murillo, de 55 años, aparentemente murió asfixiado por el efecto del humo antes de ser alcanzado por las llamas.

La víctima, quien vivía solo, era miceláneo y estaba adscrito a a la Unidad de Servicios Generales de esa cartera.

El fuego comenzó a eso de las 4:37 a.m. de acuerdo con la información de la Central del Cuerpo de Bomberos.

Al parecer, fueron dos taxistas los que dieron la voz de alerta tras observar la salida de humo y llamas de la vivienda.

El incendio tuvo lugar en el barrio Los Ángeles, sobre la calle 8, entre avenidas 10 y 12.

Espinoza, originario de Barra del Colorado, tenía una trayectoria de 35 años y, trabajaba al lado de unos 12 compañeros en unas oficinas que se encuentran ubicadas frente a la Unidad de Admisión de San Sebastián.

La casa, de unos 318 metros cuadrados, fue consumida practicamente en su totalidad, informó Jacinto Saborío de Ingienería de Incendios del INS.

“Se nos fue ‘Luchito’. Qué hombre más ejemplar”, comentó Yamileth Salas, una de las compañeras de trabajo que, al conocer la noticia, llegó a su casa.

La emergencia fue atendida por bomberos de la Central y de barrio Luján que en el lapso de 12 minutos controlaron el fuego.

¡Qué susto!

Zita M. Salas, vecina.

A mí me rompieron la puerta y me sacaron a la calle porque las llamas ya estaban sobre mi casa”.

Yamileth Sánchez, amiga.

Trabajamos juntos a lo largo de 30 años. Éramos más que compañeros, en la oficina somos como una gran familia”.