Álvaro Sáenz Zúñiga
La propuesta de hoy muestra contrastes geniales. En primer lugar Cristo, como buen gerente de una empresa que está introduciendo un producto nuevo, “sondea la opinión popular” recogiendo, de boca de sus discípulos, las apreciaciones de los que le siguen. La pregunta es simple: “¿Quién dice la gente que soy yo?”
Pero las respuestas no son tan concretas. Hay disparidad de criterios y tantas opiniones como personas. Unos creían que era Juan Bautista, otros que Elías o algún otro profeta. Jesús quiere saber más: “Ustedes, ¿quién dicen que soy yo?”.
A lo mejor hubo un silencio incómodo. Pero Pedro lo rompe y dice: “Tú eres el Mesías de Dios”. En el título Mesías, Pedro sobrentendía el éxito, fama y los atributos de un nuevo rey David.
Pero Jesús debe marcarles la cancha (para ser coherentes con la época). Debe hacerles entender que su mesianismo no es así y que tampoco es gratuito, que vendrá acompañado de acciones crueles contra él. Les dice: “El Hijo del hombre debe sufrir mucho, ser rechazado por los ancianos, los sumos sacerdotes y los escribas, ser condenado a muerte y resucitar al tercer día”.
Y agrega algo muy sencillo. Él dice a todo el que quiera acompañarlo, que debe renunciar a sí mismo, cargar con su cruz cada día y seguirlo.
Con este panorama no queda duda. A Jesús se le sigue en entrega, sacrificio, sufrimiento, rechazo, condena y muerte. Si elegimos seguirle en ese peregrinar, debemos renunciar a nosotros mismos y cargar nuestra cruz diariamente detrás de Él.
Le invito a escuchar www.radiomaria.cr
© 2010. Periódico Al Día. El contenido de aldia.cr no puede ser reproducido, transmitido ni distribuido total o parcialmente sin la autorización previa y por escrito del Periódico Al Día. Si usted necesita mayor información o brindar recomendaciones, escriba a webmaster@aldia.co.cr.