Carlos Láscarez S.
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Heredia. - Con las manos atadas y con un balazo en la nuca, fue encontrado ayer dentro de un automóvil Honda Civic, un hombre de 25 años, en lo que se presume fue un ajuste de cuentas que ahora es investigado por el OIJ local.

El hallazgo se registró a las 8:35 a.m., en una calle paralela al Conservatorio Castella, en Ulloa de Heredia, confirmó la Policía.

La víctima fue identificada como Jonathan Porfirio Mendoza Aguirre, de 25 años y vecino de Barranca de Puntarenas.

Tenía tatuado en el puño un tigre, en el antebrazo alambres de púas y el nombre de Andrey, que corresponde al de su hijo de tres años. Además, era padre de una niña de un año y dos meses.

Estaba arrecostado de medio lado en el asiento trasero del carro y con una gasa negra de plástico en las manos, comentó Jimmy Araya Arrieta, jefe de la comandancia de Heredia.

Vestía “jeans”, camiseta roja y zapatos tipo mocasín color café.

También se encontró en la parte trasera un rollo de gasas negras y una cuchilla tipo “cutter”.

El Honda Civic Hx en el que apareció Mendoza, portaba placas a nombre de un hombre vecino de Alajuela, citó una fuente ligada a la investigación.

Además, el vehículo presentaba un impacto de bala en la puerta del acompañante, que se investiga si fue reciente o no.

La zona donde apareció el cuerpo está rodeada de cafetales y es poco transitada, ya que no tiene salidas. La vivienda más cercana se sitúa a 150 metros.

Luego de que los agentes judiciales inspeccionaron la cajuela del carro, localizaron diez paquetes envueltos en cinta, similares a como envuelven la cocaína, que resultaron ser resmas de papel.

Los paquetes tenían sellos de monos encima. El cuerpo fue levantado pasadas las 2 p.m. y remitido a Medicatura Forense.